Una invasión de abejas atacó este jueves al tenista español Carlos Alcaraz y provocó la suspensión durante casi dos horas de su partido frente al alemán Alexander Zverev en el Masters 1000 de Indian Wells.
Alcaraz se disponía a servir con solo nueve minutos disputados de este duelo de cuartos de final cuando se dio cuenta de que varias abejas revoloteaban sobre su cabeza.
El vigente campeón del torneo trató primero de alejarlas con el brazo y la raqueta, pero al ser atacado por algunas de ellas corrió a resguardarse en el interior de la cancha, al igual que Zverev.
Una vez a resguardo, Alcaraz le mostró al alemán la zona en la frente donde recibió el ataque de los insectos.
Mientras tanto un ejército de abejas se amontonaba sobre las sillas a nivel de cancha, la red e incluso las cámaras de televisión de la pista central de la desértica Indian Wells, la segunda mayor del mundo con 16.000 asientos.
El juez de silla Mohamed Lahyani anunció que el partido, que estaba igualado 1-1 en el primer set, quedaba momentáneamente «suspendido por invasión de abejas» y que sería reanudado cuando fuera seguro.
La mayoría de los espectadores permaneció en sus asientos observando en las pantallas gigantes el cruce de cuartos de la estrella local, Coco Gauff, que se disputaba en una cancha aledaña.
El incidente ocurrió alrededor de las 15:20 locales (22:20 GMT) de la soleada tarde en esta desértica zona del estado de California, a unos 200 kilómetros de Los Ángeles.
Alcaraz reticente al regreso
Los organizadores convocaron de urgencia a un apicultor local que llegó para intentar resolver la situación, sin usar equipo de protección y vistiendo pantalones vaqueros y una camiseta de manga larga con el nombre de la empresa Killer Bee (Abeja asesina).
El trabajador se abocó a succionar abejas empleando una aspiradora especial mientras ambos tenistas se mantenían a resguardo junto con sus equipos.
Hacia las 16:40, Alcaraz y Zverev regresaron de buen humor a la cancha y compartieron algunas bromas.
El apicultor también saltó a la cancha para una última revisión en medio de una gran ovación de los aficionados.
Si hay abejas «estoy enfocado en ellas y no en la pelota»
La megafonía recibió con música rock al nuevo héroe local, de larga melena y gafas de sol, a quien aficionados pararon después en la grada para pedirle selfies.
A las 17:08, ambos tenistas reanudaron el juego, que estaba 1-1 igualado en el primer set, a pesar de algunas reticencias de Alcaraz al juez.
Si hay abejas «estoy enfocado en ellas y no en la pelota», alegó el murciano. «Siento que va a pasar otra vez».
Alcaraz, segundo sembrado, buscaba tomarse una revancha de Zverev después de su derrota en los cuartos de final del Abierto de Australia en enero.
Aunque es un episodio muy inusual, no es la primera ocasión en que un partido de tenis de primer nivel se ve afectado recientemente por la presencia de abejas.
En el torneo WTA 1000 de Guadalajara en 2022, el partido inaugural entre Petra Kvitova y Bernarda Pera se retrasó por un enjambre que se había adherido a la silla del juez.