La ciudad de Iligan, en la región de Mindanao, en el norte de Filipinas, es una de las más importantes ciudades del país y el principal centro industrial del sur. Cuando se habla de esta ciudad se suele hacer referencia a sus grandes industrias con chimeneas humeantes donde se producen acero, hojalata y cemento. Sin embargo, quienes conocen bien el país saben que este destino esconde una de las grandes maravillas naturales del sureste asiático.
Más allá de las industrias y los tumultuosos barrios obreros, abandonando la costa y mirando hacia el interior ser despliega una tierra de suaves colinas que van creciendo de tamaño para dar paso a empinadas colinas volcánicas y grandes montañas. Y todo eso sin abandonar en ningún momento el entorno urbano de Iligan. Este entorno es el hogar de numerosos manantiales fríos y espectaculares cataratas. Oficialmente, hay 23 cascadas dentro de la ciudad.
Por esta circunstancia, y por la belleza sobrecogedora de estos saltos de agua, Iligan es conocida como la “Ciudad de las Cataratas Majestuosas”. La más conocida de estas magníficas cascadas son las Maria Cristina Falls, en Agus River. Allí se pueden ver dos corrientes de agua cayendo en paralelo, por lo que se les conoce también como las “cascadas gemelas”.
Esta ciudad se encuentra al otro extremo del archipiélago, a unos 500 kilómetros al sur de la capital del país, Manila. Sin embargo, hay muchas comunicaciones aéreas. Desde allí, es fácil contratar una excursión en barco hasta las cataratas.