El dirigente político Yon Goicoechea reiteró este viernes que no tiene nada que ver con la Operación Gedeón, tal y como lo aseguró el régimen de Nicolás Maduro luego de ordenar su captura.
«A lo largo de mi carrera he luchado contra la dictadura y esta es la segunda orden de captura en mi contra… y las hemos pasado todas, por eso no me extrañó que lo volvieran hacer», expresó en declaraciones a la prensa a través de una videoconferencia.
Goicoechea afirmó que la Operación Gedeón es un maniobra de distracción de Nicolás Maduro ante la actual crisis que azota el país: «No quieren que la gente vea la realidad de Venezuela«.
En este sentido, aseguró que nunca ha tenido contacto ni relación con Silvercorp, la compañía de seguridad de Estados Unidos detrás del supuesto fallido intento de incursión marítima por las costras venezolanas contra Maduro.
Señaló que no le teme a las amenazas del régimen y que las acusaciones de Tarek William Saab, fiscal general impuesto por la asamblea nacional constituyente, son palabras vacías que solo buscan acabar con el equipo cercano al presidente interino Juan Guaidó.
«En Venezuela no existe la justicia. Me tiene sin cuidado porque ya he probado con mi propia carne que los cargos son irrelevantes… Entonces, no me importa de que me acusen, lo lamentable es que hemos llegado al punto en que nadie le cree a Tarek», agregó.
Y añadió: «Estoy claro que mis acciones siempre van a tener consecuencias en una dictadura como esta. Venezuela se va a librar porque todos los del régimen van para fuera. Guaidó llevara al país a la transición».
Afirmó que el régimen no se atreve a tener a Guaidó porque sabe las consecuencias que esta acción traería.
«Cuando la dictadura sabe que hay un apoyo a Guaidó, inmediatamente tratan de quitarle la cabeza a todos los que se han sentado a su lado… Pero esta gente es tan cobarde que destruyen su circulo, pero no se atreven a meter preso a Guaidó porque saben las consecuencias».
Buques de Irán
Sobre los cinco buques iraníes que llegaran a Venezuela en los próximos días con un cargamento de 1,55 millones de barriles de gasolina, el dirigente político aseguró que solo servirán para aliviar la crisis por unos días, pero que el problema de fondo continuará.
Ante ello, se preguntó: «¿Qué le estamos pagando?, ¿Cómo se hacen esas trasferencias?, ¿Le están dado oro? Yo creo que sí. ¿Les están regalando nuestras reservas?, ¿Quién hace ese negocio?, ¿Por qué Tareck el Aissami traer gasolina de Irán?, ¿Cuánto dinero se está ganando con estos cargamentos?».
Señaló que la estatal Petróleos de Venezuela solo ha sido utilizada para el narcotráfico y que en la actualidad, no produce ni siquiera para cubrir mediodía de consumo de gasolina en Caracas.
«Esto no lo pueden solucionar así. La única salida es que Maduro se largue y se cree un gobierno de emergencia nacional para obtener el financiamiento que necesitamos para reactivar el país», dijo.
Finalmente, envío un mensaje a la población venezolana, aunque lamentó realizarlo desde el exilio: «No podemos dejar la calle, pese al miedo al covid-19 o a la represión, porque nos estamos jugando la vida».
«La única manera de que yo pueda regresar a mi país o de que usted no sea detenido por pensar distinto es que nos plantemos y superemos el miedo y no seamos cómplices de estos delincuentes. Así se tumban las dictaduras», concluyó.