La búsqueda de la venezolana desaparecida en Trinidad y Tobago, Johanna Díaz Sánchez, terminó este sábado cuando su novio habría confesado haberla arrojado a un pozo negro en la parte trasera de su casa. Así lo reportó el medio local Newsday.
La División Central y la policía de homicidios acudieron a la casa de la pareja en Santa Clara Road en Preysal. Allí encontraron el cadáver en descomposición poco después de las 3:00 pm del sábado. Debido al estado del cuerpo, solo podrán confirmar la causa de la muerte después de que se realice la autopsia.
Sin embargo, el hombre que era su pareja, un mecánico de 35 años de edad, cuyo nombre no se ha revelado, está detenido desde el viernes como principal sospechoso del crimen.
Los familiares vieron a Sánchez por última vez el 28 de agosto, alrededor de las 4: 00 pm, cuando salió de su casa en Buen Intento, Princes Town. La venezolana les dijo que iba a San Fernando para encontrarse con alguien por dinero.
Un amigo la vio más tarde en San Fernando. Al día siguiente, todas las llamadas y mensajes a su teléfono celular quedaron sin respuesta.
Hace unos días, los familiares se preocuparon y reportaron su desaparición. Ellos señalaron a su pareja como el principal sospechoso debido a que anteriormente él había abusado físicamente de ella.
Los vecinos le dijeron al Sunday Newsday que la venezolana compartía una relación intermitente con el hombre en Trinidad y Tobago. «No la habíamos visto allí durante unos tres meses. No oímos ni vimos nada. Las paredes son altas, y no esperábamos algo así en esta tranquila comunidad», dijo un vecino, que pidió permanecer en el anonimato.