El Parlamento Europeo aprobó el envío a Venezuela de 12 europarlamentarios para que participen en el proceso de observación de las elecciones municipales y regionales del próximo 21 de noviembre. Así lo informó a El Nacional el eurodiputado Leopoldo López Gil desde Colombia, durante la Asamblea Parlamentaria Eurolatinoamericana.
En el país ya se encuentran 60 de los 100 expertos de la Misión de Observación Electoral aprobada por el Servicio Exterior de la Unión Europea. Pero, en el caso del Parlamento Europeo, los europarlamentarios llegarán con al menos cinco días de anticipación para los comicios, en los que participa una parte importante de la oposición.
“Es una misión europarlamentaria. Se aprobó el envío de una misión de 12 personas en las que están proporcionalmente representados todos los grupos políticos del Parlamento Europeo y la debe presidir una persona diferente a Isabel Santos, diputada del Partido Socialista de Portugal, que es quien lidera la misión de expertos”, explicó.
Partido Popular o Renovar Europa
López Gil, padre del líder opositor Leopoldo López, adelantó que posiblemente la misión de europarlamentarios esté presidida por un diputado del Partido Popular Europeo o de Renovar Europa. Esa decisión —así como los nombres de quiénes conformarán el grupo y qué cargos asumirán— se tomará posiblemente el martes 9 de noviembre, de manera presencial, en Bruselas.
“Son 12 personas aprobadas, cuando normalmente las misiones de este tipo no pasan de 7, que sean 12 da una idea de la importancia que se le está dando a Venezuela”, manifestó el político, quien ha sido un firme crítico del gobierno de Nicolás Maduro.
Dijo que la delegación debería tener la libertad de observar las elecciones y conversar con los diferentes sectores de la sociedad. También tener la visión política que no tendrá la Misión de Observación Electoral, que se encargará del aspecto técnico.
Así, enfatizó López Gil, el Parlamento Europeo le informará a Venezuela su posición final los resultados que haya recogido de la observación.
Una misión con observación política
El gobierno de Maduro ha rechazado que la Unión Europea interfiera de alguna manera en los comicios. López Gil afirmó que se sobreentiende que cuando un país invita al Servicio Exterior para una observación, está la posibilidad de que se incluya la misión del Parlamento Europeo.
“Sería un absurdo que se excluya a la misión política (enviada por el Parlamento Europeo) de la misión técnica (enviada por el Servicio Exterior). El Parlamento Europeo no lo aceptaría”, manifestó.
Dijo que la posición que tengan los europarlamentarios seguramente generará diferencias con el gobierno de Maduro. Y recordó que el Parlamento Europeo no reconoció las elecciones presidenciales de 2018 ni las parlamentarias de 2020.
“Esa es la realidad, que se está yendo a un sitio donde no son reconocidos y, por lo tanto, habrá dificultades. Ahora, eso no es injerencia. Lo que haremos es observar. Quiero resaltar que el propósito de todas estas misiones son las recomendaciones en los informes finales; y que, precisamente, se perfeccionen los procesos para que sean democráticos, lo más verificables y transparentes posibles. Si a esto lo vamos a llamar injerencia, creo que no hay buena voluntad de parte de Venezuela”, expresó.
El Parlamento Europeo fijará su posición sobre el proceso, pero después de que los europarlamentarios finalicen su visita a Venezuela. Las observaciones oficiales las dará a conocer Isabel Santos, jefa de los expertos electorales enviados por Josep Borrell.
El 23 de diciembre se presentará un informe preliminar y el documento final será público a mediados de enero y febrero del año próximo.
La Misión de Observación Electoral verificará, en los aspectos técnicos el marco legal y su aplicación, el trabajo de la administración electoral; las actividades de campaña, el papel de las instituciones estatales y la sociedad civil. Además de la cobertura de los medios de comunicación, la votación, el escrutinio y la divulgación de resultados; el entorno en el que se desarrollan las elecciones y el proceso de quejas y apelaciones.