Los regímenes de Irán y Venezuela quieren sostener conversaciones con el gobierno de Estados Unidos, pero para ello deben esperar hasta después de las elecciones del 3 de noviembre, afirmó el presidente Donald Trump durante un encuentro con la comunidad latina en el National Doral Trump de Miami.
“Nosotros impusimos las sanciones más duras que alguna vez se habían aplicado hacia Venezuela y haremos tratos increíbles para todos estos países, pero tienen que esperar hasta después de las elecciones”, expresó el mandatario estadounidense refiriéndose también a Cuba, Nicaragua e Irán, cercanos al régimen de Nicolás Maduro.
“Nosotros hace un año ofrecimos la opción de conversar pero no sucedió. Ahora será luego de la elección, pero será un trato más agresivo”, advirtió.
Trump aprovechó el encuentro para resaltar el daño que puede hacer el socialismo en el mundo, citando particularmente el caso venezolano.
“Yo solía decir que podemos ser otra Venezuela. Hace 15 años era un país rico, parecía que tendrían un futuro tremendo y de la nada cambiaron su ideología. Ahora nosotros les mandamos agua y comida. No tienen nada”, lamentó.
El 22 de septiembre, durante la Asamblea General de la ONU, Trump reiteró su apoyo a Venezuela.
“Estamos junto al pueblo de Cuba, Nicaragua y Venezuela en su lucha justa por la democracia y la libertad”, dijo.
En su discurso también responsabilizó a China por la crisis mundial generada por la pandemia del coronavirus.
“Debemos responsabilizar al país que desató esta plaga en el mundo: China”, afirmó.
El mandatario criticó que las medidas iniciales que tomó el país asiático cuando apareció el virus no protegieron al resto del mundo.
“En los primeros días del virus China suspendió sus desplazamientos internos, mientras que permitió que vuelos salieran de ese país a todo el mundo. China condenó mi prohibición de viajes a ese país mientras cancelaban sus vuelos nacionales y confinaban a la población en sus hogares. El gobierno chino y la Organización Mundial de la Salud, que está prácticamente controlada por China, declararon que no había evidencia de transmisión de persona a persona, luego declararon que las personas que no presentaban síntomas no transmitían la enfermedad”, indicó.