El tribunal estadounidense a cargo del caso del empresario colombovenezolano Alex Saab, al que se acusa de lavar dinero de la corrupción en Venezuela, comenzó este lunes las audiencias con testigos para determinar si el acusado tiene inmunidad diplomática.
La defensa, que ha alegado que Saab tiene rango diplomático desde que fue detenido en 2020 en Cabo Verde (África) en razón de una orden de captura internacional solicitada por la justicia de Estados Unidos, adonde fue extraditado en octubre de 2021, presentó este lunes varios testigos en apoyo de su argumento.
«Si parece un pato, actúa como un pato, grazna como un pato, entonces es un pato», dijo Jonathan New, uno de los abogados de Saab, al declarar al inicio de la audiencia presidida por el juez Robert N. Scola.
Desde Venezuela testificó vía Zoom una funcionaria del Ministerio de Relaciones Exteriores, la cual aseveró que los documentos presentados por la defensa en los que Saab figura como enviado especial del gobierno de Venezuela a Irán son auténticos.
En mayo, una corte de apelaciones de Estados Unidos rechazó un recurso con el argumento de la inmunidad presentado por Saab y remitió el caso al tribunal de primera instancia en Miami.
El juez Scola es por tanto quien decidirá si la acusación contra Saab por lavado de dinero, la única de las ocho por la que fue extraditado que quedó en pie una vez que el empresario pasó a manos de la justicia de Estados Unidos, se mantiene y es sometido a juicio o si, como pide la defensa, es desestimada.
El caso de Alex Saab
Alex Saab, de 50 años de edad, fue extraditado a Estados Unidos el 16 de octubre de 2021 desde Cabo Verde, una excolonia portuguesa en el oeste de África, después de un largo y complejo proceso en el que la defensa agotó todas las instancias para hacer valer que el empresario estaba en un viaje como enviado especial del gobierno venezolano a Irán para adquirir alimentos y medicinas.
Según la acusación, entre 2011 y por lo menos 2015, Saab y su socio Álvaro Pulido, que está prófugo, conspiraron con otros para lavar unos 350 millones de dólares de ganancias de una red de corrupción sustentada en sobornos dirigidos a obtener contratos para realizar proyectos públicos y fraudes al sistema de control de cambio de divisas en Venezuela.
Saab, al que se ha negado la libertad bajo fianza por riesgo de fuga, se declaró no culpable del cargo de lavado de dinero.
El mes pasado la Fiscalía, que representa al gobierno de Estados Unidos en este proceso, reclamó al juez Robert N. Scola que no retire la acusación contra Saab, como pide la defensa, porque a su juicio no goza de la inmunidad diplomática alegada.
Incluso señaló que una copia digital de un anuncio de nombramientos diplomáticos en la gaceta oficial venezolana en la que aparece Saab entre los nombrados no se corresponde con el original, en donde la Fiscalía asegura que no figura el acusado.
¿Inmune o no?
«Saab Morán no tiene estatus diplomático en Estados Unidos. Sus alegaciones de inmunidad han sido litigadas y denegadas en su totalidad en Cabo Verde», subrayan los fiscales.
El gobierno de Maduro ha manifestado, incluso en foros internacionales, su rechazo al proceso judicial estadounidense y alegado que Saab está detenido ilegalmente.
En coincidencia con la llegada de Saab a Estados Unidos en octubre de 2021, Nicolás Maduro canceló el diálogo que mantenía con la oposición en México, que estuvo interrumpido hasta hace unos días.
Según la Fiscalía, Saab «no ha satisfecho los elementos para la inmunidad de tránsito bajo la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas o el derecho internacional consuetudinario».
En las casi 40 páginas de su petición al juez, la Fiscalía también hizo hincapié en que Estados Unidos no reconoce legitimidad a Maduro ni tampoco a miembros de su «régimen» como diplomáticos representantes de Venezuela, porque a día de hoy reconoce a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela.
En Estados Unidos una organización denominada Comité Liberen a Alex Saab ha estado convocando protestas para pedir que acabe el «secuestro» del empresario de Barranquilla (Colombia) nacionalizado venezolano y considerado un presunto «testaferro» de Maduro, en Nueva York, Chicago y Miami.
Un grupo reducido de personas se manifestó este lunes frente a los tribunales de Miami con pancartas en las que pidió la liberación del «diplomático Saab».