El teniente coronel del Ejército Igbert José Marín Chaparro, preso político del gobierno de Nicolás Maduro, ha rebajado seis kilos por la huelga de hambre que comenzó hace casi 20 días. Detenido en la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, el militar exige, entre otras cosas, el respeto a sus derechos humanos y su libertad.
“Luego de 17 días de huelga de hambre se va produciendo un deterioro del estado de salud. Entendemos que ha perdido aproximadamente seis kilos en este proceso, simplemente está sometido a hidratación. Pero evidentemente dia a día sufre un deterioro de su salud y es lo que preocupa a sus familiares y a la defensa”, informó este jueves el abogado Alonso Medina Roa.
Denunciado ante instancias internacionales
La defensa del teniente coronel ha denunciado la situación ante instancias internacionales, como el Comité contra la Tortura y el Comité contra las Detenciones Arbitrarias. Afirmó asimismo que mantienen comunicación con la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y funcionarios del Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
“Todas las instancias internacionales que de una u otra manera cubren el tema de derechos humanos en Venezuela o que han mantenido sus ojos en esta situación están al tanto. Sin embargo, afirmamos con absoluta responsabilidad la poca eficiencia que han tenido los organismos nacionales que están llamados a velar por el tema de los derechos humanos, como la Defensoría del Pueblo y otras instancias que han demostrado poca afectividad”, manifestó.
La huelga de hambre es una decision personal de Marín Chaparro. Medina Roa afirmó que el teniente coronel es un hombre de ideales y de principios y que mantiene su lucha colectiva porque, señaló, entre sus peticiones está lograr la libertad de los presos políticos.
Exige visita de representantes de Bachelet
Marín exige asimismo la visita a la sede de la Dgcim de representantes de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, a cargo de Michelle Bachelet, y del Comité de la Cruz Roja Internacional. Además del encargado de negocios de la Unión Europea en Venezuela y del nuncio apostólico del Vaticano.
“Para que verifiquen in situ los tratos crueles, inhumanos y degradantes a los cuales somos sometidos a diario y yo, particularmente, por dos años consecutivos”, manifestó el preso político en una carta pública, divulgada en las redes sociales.
Exigió asimismo que el Ministerio Público y de la Defensoría del Pueblo constaten la situación para que le den curso a las denuncias hechas ante organismos internacionales, como la Corte Penal Internacional, por el uso sistemático de torturas y tratos crueles en su contra.
Señaló los “secuestros” en la Dgcim y las condiciones de los demás presos políticos en el país. “Solicito la eliminación de la Casa de los sueños como depósito de seres humanos y centro de torturas y violaciones de los derechos fundamentales”, agregó.
El teniente coronel, sentenciado a siete años y medio de prisión, pidió además la liberación de todos los presos políticos civiles y militares mediante un indulto verdadero que se respete y dé fe de la voluntad de construir un país plural y democrático, apegado a la Constitución de la República.
Pidió la reanudación de la negociación
Solicitó la reanudación de la mesa de negociación en Ciudad de México entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición que lidera Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por al menos 50 países. Finalmente, exigió que se incorpore a ese proceso una delegación de expresos políticos como muestra del deseo de conciliación nacional y de justicia para lograr la paz, la democracia y la felicidad del país.