Un preso muerto, seis hospitalizados, uno de alta y tres devueltos al penal sin ser evaluados “es el resultado de la falta de atención médica, agua e higiene en el Centro Penitenciario David Viloria, conocido como Uribana, en el norte de Barquisimeto, estado Lara”, informó el Observatorio Venezolano de Prisiones.
El penal está bajo medidas provisionales emitidas el 2 de febrero de 2007 por la CorteIDH y “el Estado debe responder por la vida, salud e integridad de cada uno de los reclusos que se encuentran en esa cárcel”, señaló la ONG.
“Los doctores, las enfermeras y los que tienen el poder nos están matando”, indicó un detenido que se comunicó por teléfono con el OVP. Agregó que solo hay un médico para el penal y 4 enfermeras que se turnan para una población de 2.226 presos.
“Cuando acudimos enfermos, como ellas se sienten que tienen el poder, de inmediato nos maltratan verbalmente. Ante cualquier dolor, fiebre o diarrea, que son comunes en nosotros, nos dan la ‘milagrosa’; le decimos así porque es una pastilla de paracetamol que es la que dan para todo. Únicamente te sacan si es algo grave”, dijo.
El informante agregó que el médico “se presta para todo porque su excusa es decir que no hay más nada, porque eso es lo que manda el gobierno”.
En el penal hay dos áreas en las que se encuentran los enfermos. En una están los que padecen de hepatitis, que son 35 aproximadamente, y en la otra hay 18 con tuberculosis. Unos reciben tratamiento, a algunos las medicinas se las lleva la familia y a otros, ni siquiera eso: “Solo están allí esperando que les toque morirse”.