Luego de más de un mes del desbordamiento del río Romerito, que dejó cuatro personas fallecidas en Choroní, la hermana del niño de 4 años desaparecido pide que se continúe con la búsqueda.
María Gabriela Martín Soldner perdió a tres familiares en el desastre, ocurrido el 21 de agosto: su madre, Gabriela Soldner; el padre de su hermano, Agustín Alonso; y Maribel Linares, prima de Agustín. Todos, incluido el menor Santiago Alonso Soldner, estaban en un Aveo azul.
Otro hombre, llamado José Manuel Gonçalves Gorcho, murió tras quedar atrapado entre una camioneta y un carro.
“Todavía no lo hemos conseguido (a Santiago), pero estamos luchando para que las autoridades respondan y nos digan el nuevo protocolo a seguir para la búsqueda”, indicó Martín, que ha agradecido el apoyo de Protección Civil, Inparques y los Bomberos.
Después del desbordamiento, las autoridades se activaron para hallar al niño. Sin embargo, las labores de rescate fueron suspendidas cuando se cumplieron los ocho días reglamentarios.
Martín considera que hay que seguir tras la pista de su hermano porque no existen evidencias de que esté muerto, así que que sostuvo encuentros con las autoridades, con quienes acordó reestructurar la búsqueda. “Tengo el presentimiento de que podría estar con alguien. Por ahí (en la carretera) hay muchos ranchitos. Quizás está con una persona que está asustada y no lo quiere devolver por miedo a meterse en problemas”.
Afirmó que mientras no tenga una prueba de que su hermano falleció, no dejará de insistir en su búsqueda: “Santiago no está muerto, está desaparecido. Cuando una persona está desaparecida, hay que buscar respuestas. Estamos hablando de un menor de edad. Su derecho como niño es que sea buscado”.