El cadáver de Frank Jugo Westall, de 62 años de edad, que se preparaba para viajar a España dentro de 2 o 3 semanas para reunirse con su esposa y tres hijos, fue localizado el lunes en la habitación de servicio de su domicilio ubicado en la quinta Chiquinquirá, en la avenida Caroní de Colinas de Bello Monte.
El cuerpo fue localizado por un familiar que habló con la víctima por teléfono, el sábado a las 5:00 pm.
Como Jugo Westall era propietario de la casa hogar Santo Domingo, en Bello Monte, al personal de esta dependencia le extrañó que el domingo ni el lunes se presentó a hacer el recorrido de costumbre.
La novedad fue notificada al familiar que conversó con él el sábado y este se dirigió a la quinta Chiquinquirá. Al llegar le llamó la atención que el auto de Jugo Westall no estuviera en el garaje y que las luces estaban encendidas. Era muy cuidadoso y de día nunca dejaba lámparas prendidas.
Al entrar a la vivienda se percataron de que la sala estaba en desorden. Luego en la cocina observaron la ausencia de dos hornos: uno eléctrico y otro microondas, y además también se habían llevado las hornillas de la cocina. Al seguir observando el área se percataron de que cargaron con los alimentos.
La búsqueda continuó por el segundo piso. Las habitaciones estaban en completo desorden y al llegar al cuarto de servicio hallaron el cadáver de Jugo Westall que era graduado en Educación en la UCAB.
Los familiares notificaron lo ocurrido al Cicpc y una comisión de funcionarios acudió al sitio para inspeccionar el lugar, colectar evidencias y trasladar el cuerpo a la morgue de Bello Monte. Ayer los parientes esperaban el resultado de la autopsia para conocer las causas de muerte.
Presumen que pudo ser sorprendido por uno o varios individuos que entraron con él al domicilio, cuando llegaba en el auto Renault Twingo, de color azul. La pesquisa de la policía judicial determinará lo ocurrido.
En la urbanización donde está la quinta Chiquinquirá solo hay cuatro viviendas. Es un área solitaria. La reja principal de la zona está dañada y permanece abierta.
Jugo Westal era dueño de dos casas hogar, que se mantienen de donaciones, indicaron los familiares, y el propietario también recogía a personas que encontraba en la calle o que habían salido de otras casas de esas características. Además, ayudó a fundar hogares para personas mayores y asesoraba a sus propietarios.
Durante las diferentes labores que desempeñó, tuvo como asistente a la ex ministra del Trabajo, María Cristina Iglesias, y el actual ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz, recorría con él sectores populares dictando charlas de alfabetización.
Sus parientes indicaron que en su juventud Frank Jugo Westall entró al seminario porque aspiraba a ser sacerdote, pero luego se retiró.
La esposa y los tres hijos de la víctima tienen tres años residiendo en España. Los hijos son graduados en Psicología, Economía y Educación.
Un hermano de Jugo Westall murió en España a consecuencia de parkinson. Había viajado a ese país porque en Venezuela no conseguía los medicamentos para tratarse la enfermedad.
En la Petare Guarenas
José Eugenio López, de 73 años de edad, que se desempeñaba como vigilante nocturno de la empresa Sumarpi ubicada en la carretera Petare-Guarenas, murió durante un robo perpetrado en esa compañía, el sábado pasado.
Al sitio entraron varios hombres y le dieron un tiro en un brazo, pero López, que laboraba en esa empresa desde 1998, corrió por las escaleras, cayó y se ocasionó un traumatismo craneoencefálico. Pereció en el hospital Pérez de León II de Petare.