La Policía Nacional de Perú detuvo a una joven venezolana de 19 años de edad señalada de liderad una red de extorsión contra trabajadoras sexuales en toda la ciudad de Lima. Eglismar Reyes, identificada por los medios locales como “la dama del sicariato”, pertenecía a la banda criminal Los Gallegos, una presunta fracción del sanguinario Tren de Aragua.
Reyes, alias Andrea o La Guaireña, se encargaba de asignar los sitios donde debían trabajar las mujeres, sobre todo personas trans, para tenerlas localizadas. Un reporte de 24 Horas, de Panamericana Televisión, señala que la joven avisaba a la organización criminal quiénes no pagaban los cupos para amenazarlas y hasta asesinarlas.
En sus redes sociales presumía de los gustos de daba con el dinero que recibía de la extorsión. Maquillada y con ropa de marca y provocativa, con frecuencia se le veía en discotecas y restaurantes, bebía, fumaba y expresaba su amor a su pareja, con quien aparecía en muchas de las fotos y videos.
Daiverson Rodríguez y Eglismar Reyes | Fotos: archivo
En imágenes registradas por las cámaras de seguridad de la ciudad, se observa que la joven constantemente estaba entre los grupos de trabajadoras sexuales, a quienes además amenazaba, pero jamás se involucró con algún cliente.
“Hablamos de la corporación criminal del Tren de Aragua, que nace en el año 2009 en el estado Aragua, en la cárcel de Tocorón, dominada por presos. Ni siquiera la misma policía venezolana puede ingresar. Estamos hablando de una corporación criminal peligrosa, brutal y sanguinaria, con lazos incluso en países de Europa. En la región están en Venezuela, Ecuador, Colombia, Perú, Chile, Argentina y Brasil”, indicó el periodista Luis Vargas, del programa dominical Panorama.
El asesinato de dos mujeres trans
A Reyes se le vincula con los asesinatos de Rubí Ferrer y Priscila Aguado, dos mujeres trans que ofrecían servicios en el centro de Lima, reseñó La República, porque se negaron a pagar los cupos. Un video obtenido por la Policía Nacional de Perú muestra el momento en el que Cielo, otra de las trabajadores sexuales, confrontó a la Guaireña. Le dejó en claro que no obedecería sus órdenes.
Según las versiones oficiales, la joven ordenó a los sicarios su asesinato, pero los sujetos no lograron el objetivo, por lo que decidieron ultimar a dos de sus amigas como una advertencia a quienes se atrevieran a rebelarse.
Un sicario identificado
Dos sujetos se hicieron pasar por clientes, uno de los sicarios de nacionalidad venezolana ya identificados, quienes descargaron más de 30 balas contra de Rubí en la localidad de Carabayllo. Mientras, Priscila, a quien asesinaron posteriormente, presenció el hecho desde el interior de un vehículo.
Reyes se habría encargado de difundir el video en el que se observa el momento en el que Rubí suplica que no la maten.
El tatuaje de una rosa en la muñeca permitió identificar a Daiverson Rodríguez. Se trata del hombre de 31 años de edad que asesinó sin piedad a las trabajadoras sexuales. Ahora, las autoridades peruanas lo están buscando.
Además esos crímenes, el grupo estaría involucrado en otros delitos.
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Rodríguez, al igual que Reyes, muestra su vida en las redes sociales.
En TikTok, dedicó varios videos a su pareja, que se identificaría como Barby, fumando presunta marihuana, viajando y divirtiéndose en diferentes sitios. En los comentarios, personas han exigido justicia para sus víctimas.