Familiares de Jesse Gabriel Pérez Chávez, de 29 años de edad, denunciaron que este fue ultimado por una comisión de la FAES, de la PNB, el miércoles a las 5:00 am, en uno de los dos sótanos del edificio Juana La Avanzadora, sector La Pista, en el kilómetro 9 de la carretera Petare-Santa Lucía.
Ruth Pérez, hermana de la víctima, dijo que a esa hora los funcionarios tomaron los 3 pisos de la estructura que está invadida por 68 familias, y no dejaron salir a nadie. A los apartamentos vacíos y cuyos ocupantes no se encontraban, les tumbaron las puertas, robaron enseres y causaron destrozos.
Al irrumpir en la vivienda de Pérez Chávez, albañil de oficio, lo despertaron junto con su esposa y sus hijos, de 2, 4 y 6 años de edad, que comenzaron a llorar cuando vieron que a empujones y golpes sacaban a su padre del apartamento. Al poco rato se oyeron detonaciones intermitentes que se repitieron, pero luego hubo una ráfaga de disparos y los familiares presumen que simulaban enfrentamiento. A Pérez Chávez le colocaron un revólver, afirmó su familiar.
Mientras eso ocurría la familia quedó encerrada en su apartamento. La esposa del albañil quedó a cargo de una mujer policía de la FAES que le dijo que la llevaría detenida junto con sus tres hijos por lo que la esposa de Pérez indicó que le llevaría los niños a su madre. Cuando ella bajó vio que a su marido lo tenían en un apartamento, sentado en el piso, con la cara cubierta con una franela. “Estaba vivo”, relató. Lo mataron de un tiro en el pecho.
“No tenía antecedentes y nunca estuvo preso”, dijo Ruth Pérez. Los policías recogieron los casquillos de balas sin esperar la inspección que haría el Cicpc.
También se llevaron documentos de identidad de la víctima, así como la cédula de un hermano fallecido.
La hermana de Pérez Chávez señaló que no todas la gente que vive en invasiones o barrios son delincuentes.
“Señor presidente, tremenda ayuda nos está dando con su grupo de asesinos; nos están matando. Joden al pendejo”, expresó.
Las familias que tomaron el edificio Juana La Avanzadora tienen ocho años esperando que les construyan viviendas. Anteriormente esa estructura fue sede de la Escuela de Formación de Detectives de la antigua PTJ; luego fue un refugio. Los vecinos han denunciado dos veces en Fiscalía las actuaciones de la FAES y no ha pasado nada.
Los Pérez Chávez llevarán el caso a todas las instancias para pedir justicia.
Otro caso. Oscaibert Enrique Aguilera Hernández, de 22 años de edad, fue sacado del refugio Galería Fe, en Macarao, por funcionarios de la FAES, el miércoles a las 7:00 am, según sus familiares. En ese lugar dormía con su madre y frente a ella se lo llevaron a un callejón y le dieron ocho tiros. Era hijo único. Afirmaron que los policías agarraron por el cuello a la madre.
Aguilera Hernández estuvo preso tres años en la cárcel de Puente Ayala, Anzoátegui, junto con otros dos hombres, por el delito de complicidad en un homicidio y salió en libertad. El día de su muerte, entre los policías que llegaron al refugio había un encapuchado, presunto hermano del hombre que habían matado en Macarao.