La expulsión de 138 migrantes venezolanos y colombianos de Chile se llevó a cabo sin un debido proceso, afirmó el Servicio Jesuita a Migrantes de Chile.
“Eso es evidente. Las autoridades se niegan a reconocer lo que hay detrás, y es lo que ya han señalado la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos y otras autoridades internacionales: lo que se vive en Venezuela sin lugar a dudas entra en nuestra ley de refugiados”, explicó la presidenta del directorio del Servicio Jesuita a Migrantes, Macarena Rodríguez, en entrevista a TVV Venezuela.
Rodríguez indicó que la Ley de Refugiados de Chile establece que los refugiados no pueden ser sancionados por ingresar por un paso no habilitado.
“Las autoridades dicen que ingresan de forma ilegal, sin visa, pero ellos no tienen manera de entrar de manera ilegal porque Chile les exige un visado que las personas hoy día no pueden conseguir”, subrayó.
En dos años, continuó, apenas 5% de las Visas de Responsabilidad Democrática solicitadas fueron aprobadas por Chile. “La autoridad dice que no ingresan de manera legal, como si pudiesen hacerlo”, criticó.
Chile expulsó este miércoles a un grupo de 138 migrantes venezolanos y colombianos que se encontraban varados en la frontera norte con Bolivia, una zona que desde hace días vive una fuerte ola migratoria que ha llevado al límite a pequeñas localidades fronterizas.
“Estamos en presencia del primer vuelo que sale desde el norte y da cuenta de un proceso de expulsión, en su mayoría personas que ingresaron de forma clandestina hace menos de tres meses”, dijo el ministro de Interior Rodrigo Delgado desde la pequeña localidad de Colchane, próxima a la frontera con Bolivia.
La tensión en dicho paso fronterizo se agravó la semana pasada con el fallecimiento de dos extranjeros, un colombiano y un venezolano.