gatos y perros
Según Luisa Beroes, este es un gato sobreviviente de los ataques

La isla de Margarita es conocida por sus ventajas turísticas para venezolanos y extranjeros. Sin embargo, en una calle del urbanismo Los Cocoteros, municipio Gómez, habita Yilmelys Valerio, quien ha sido denunciada en repetidas oportunidades y está siendo señalada por las proteccionistas de animales del estado Nueva Esparta por el envenenamiento y tortura de decenas de gatos y perros de la zona.

Las denuncias constan en la Fiscalía, pero aún no ha habido un pronunciamiento. También han denunciado en la prefectura de la municipalidad y la gobernación. Las proteccionistas son en su mayoría mujeres humildes de la tercera edad que no cuentan con medios económicos ni políticos para defenderse por sí mismas.

Los animales son gatos y perros callejeros, huérfanos, sin hogar ni nadie que se haga cargo de ellos.

Dada la falta de presencia de la fundación Nevado y otros organismos de protección de animales, ha quedado en manos de las ciudadanas la labor de proteger los animales de la calle. Es este vacío de los órganos reguladores, lo que aprovechó Valerio.

Las evidencia de sus acciones se hicieron públicas en una cuenta de Instagram.

Presuntamente Valerio tiene un hijo en la policía científica, en la sede de Juan Griego, municipio Marcano, lo que aprovecha para amedrentar a quien se atreva a denunciarla.

Denuncian por envenenamiento y tortura de gatos y perros

Las proteccionistas Luisa Beroes y Alejandra Beroes hicieron la denuncia pública dirigida al fiscal general de la República, Tarek William Saab.

“Soy proteccionista y rescatista de animales. Acudo ante usted porque los animales de la calle que habitan en la zona donde vivo han sido cruelmente envenenados. Lamentablemente las amenazas de la ciudadana Yilmelys Valerio se han cumplido”, denunció Luisa Beroes.

“En busca de protección y justicia acudí en dos oportunidades a la Oficina de Atención a la Víctima, así como también a la Fiscalía 12 por el ataque a una gata, cuya mandíbula fue fracturada, según confirmó la médico veterinario Peymari Hernández, presidente del Colegio de Veterinarios. Temo por mi vida. Les ruego protección y justicia. No sé a donde más acudir”, agregó.


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