Trabajadores de la salud en el estado Carabobo denunciaron este miércoles que a quienes no tengan carnet de la patria les niegan la inmunización contra el covid-19.
Médicos que asistieron a vacunarse en la Ciudad Hospitalaria Dr. Enrique Tejera, conocido como Hospital Central de Valencia, se quedaron sin ser inoculados porque les exigían el instrumento impuesto por el Estado.
«Denunciamos la práctica fascista que se lleva a cabo en los estados Carabobo y Yaracuy donde las supuestas autoridades practican la discriminación a la población aplicando el filtro del carnet indecente. Los mayores de 60 años que no están inscritos y no portan carnet no los vacunan», denunció la ONG Médicos Unidos Venezuela.
Venezuela, de 30 millones de habitantes, ha recibido 1,4 millones de dosis, según el ministro de Salud, Carlos Alvarado. Lo que supone 2,3% de la población.
El Estado, mediante un plan de vacunación del que se sabe poco, ha inoculado a trabajadores de la salud, maestros, cuerpos de seguridad y autoridades, incluido Nicolás Maduro, pero el personal sanitario ha denunciado retardos y la politización de las vacunas.
Mediante el carnet de la patria el Estado comenzó a sortear vacunas entre adultos mayores afiliados al sistema, pero no todos los venezolanos están inscritos en ese mecanismo.
Recientemente se conoció de la llegada de 930.000 dosis de vacunas repartidas en varios viajes y fechas, pero la semana pasada el ministro de Salud dijo que el país cuenta con 1.480.000 unidades, sin que se conozca en qué momento se recibieron las 550.000 que marcan la diferencia ni de dónde proceden.
Por su parte, Maduro informó que completó «con sacrificios» el pago de 120 millones de dólares para vacunar a unos 5 millones de personas mediante el mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud, mientras que Juan Guaidó, a quien Estados Unidos dio control de fondos venezolanos congelados, adelantó la liberación de 130 millones de dólares para las vacunas.