El régimen de Nicolás Maduro quedó este martes fuera del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas. En las elecciones, que se desarrollaron en la Asamblea General, solo recibió el apoyo de 88 países, por lo que no alcanzó el mínimo de 97 voluntades necesarias para seguir manteniendo la plaza que ocupaba.
Chile y Costa Rica se impusieron a Venezuela, que optaba a la reelección y pugnaba con ellos por una de las 2 vacantes para los países de Latinoamérica y el Caribe. Los otros 12 miembros son Argelia, Bangladesh, Bélgica, Georgia, Alemania, Kirguistán, Maldivas, Marruecos, Rumania, Suráfrica, Sudán y Vietnam. Estarán en el cargo hasta 2025.
“Celebramos que el régimen de Nicolás Maduro, responsable de crímenes de lesa humanidad y la migración forzosa de casi 7 millones de venezolanos, quede fuera del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Una brisa de justicia”, manifestó David Smolansky, comisionado para la crisis de refugiados y migrantes venezolanos de la Organización de Estados Americanos, en Twitter.
Rafael Uzcátegui, coordinador general de la organización no gubernamental Provea, dijo: “Venezuela cosecha lo que sembró en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU: luego de amenazar a sus miembros por votar de una manera en sus propios procedimientos, ha quedado fuera de su composición para los próximos meses”.
Un logro para grupos de DD HH
Numerosas organizaciones, grupos y activistas habían pedido a los Estados miembros del Consejo votar en contra de la presencia del chavismo por su historial de represión y por las graves denuncias de violaciones de los derechos humanos que recaen en su contra.
“El vengativo ataque de Venezuela contra los críticos del gobierno hace que el país no sea apto para la membresía del principal organismo de derechos humanos de la ONU”, dijo en un comunicado la semana pasada Louis Charbonneau, director para las Naciones Unidas de Human Rights Watch.
UN Watch también expresó su consideración de que elegir a Venezuela supondría “dar una bofetada” a los millones de venezolanos que sufren de abusos por parte del régimen socialista y a los millones más que se vieron obligados a huir de un “Estado fallido”.
Crímenes contra la humanidad
La Misión Internacional Independiente de las Naciones Unidas sobre Venezuela reveló el mes pasado que el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional y la Dirección General de Contrainteligencia Militar, según sus investigaciones, cometen en la actualidad crímenes de lesa humanidad para reprimir a la disidencia política.
Los organismos de seguridad aplicarían un modus operandi de abusos dictados desde el más alto nivel. Asimismo, los expertos describieron las torturas y maltratos sufridos por decenas de personas en centros de detención de esos servicios de inteligencia, leales a Maduro.
Con ese precedente, el Consejo de Derechos Humanos aprobó la semana pasada la renovación por dos años del mandato de la Misión de Determinación de los Hechos para que documente las violaciones que se cometen en el país.