El régimen de Nicolás Maduro una vez más hizo una rueda de prensa para desvirtuar el informe de la Misión de Determinación de los Hechos de la Organización de las Naciones Unidas que documentó casi 3.000 casos de violación de derechos humanos en el país, que responderían a una política de Estado permitida por altos funcionarios del chavismo.
«Venezuela no puede darle validez a esto, presentado por el Grupo de Lima, votado por países que no reconocen al gobierno venezolano y que pretende sustituir el trabajo de la alta comisionada Michelle Bachelet y sus equipos en Venezuela de manera tendenciosa y sesgada para atacar«, declaró Jorge Arreaza, ministro de Relaciones Exteriores.
El canciller estuvo acompañado de Tarek William Saab, fiscal general de la República designado por la asamblea nacional constituyente; Alfredo Ruiz, defensor del Pueblo; y Larry Devoe, secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Derechos Humanos.
Arreaza negó que el régimen no haya respondido a las solicitudes hechas en su momento por la Misión de Determinación de los Hechos.
«No es así. Nuestro embajador les dijo que Venezuela está trabajando con la Oficina de la Ata Comisionada para los Derechos Humanos, que establecimos una carta de trabajo conjunto que firmamos con Bachelet y que hay en Venezuela un equipo de derechos humanos y con ellos vamos a seguir trabajando», expresó.
«Se les dijo formalmente, y cada vez que enviaban una comunicación se les respondía que hablaran con la alta comisionada. Nosotros no vamos a avalar un ataque contra Venezuela de esa magnitud. La Unión Europea y otros países se lamentaron de que el gobierno no los dejó entrar. No, ya están aquí. Tienen seis funcionarios y vienen expertos con frecuencia», agregó el canciller.
Saab, durante su intervención, afirmó asimismo que el Ministerio Público recibió una sola comunicación del equipo de expertos conformado por Marta Valiñas, Francisco Cox y Paul Seils para indagar sobre los casos que incluirían en el informe. El fiscal de Maduro calificó el proceso de averiguación de telepático y fantasmagórico.
«Vemos cuáles fueron las fuentes para ese informe: vía redes sociales. Así es muy sabroso trabajar por los derechos humanos, donde no están ni remotamente haciendo el roce real por la lucha de la dignidad humana», dijo Saab.