El gobierno de Nicolás Maduro ordenó el 19 de febrero de 2019 el cierre de las comunicaciones aéreas y marítimas de Venezuela con Aruba, Bonaire y Curazao. La Zona Operativa de Defensa Integral informó en ese momento que el bloqueo, aún vigente, se enmarca en un operativo para el resguardo de la soberanía del país ante posibles incursiones no autorizadas.
Se comunicó asimismo, que la medida tendría una duración indefinida y hasta que las fuerzas del orden de la región costera y limítrofes reciban nuevas directrices por parte de las autoridades venezolanas. Las autoridades venezolanas aseguraron que no había motivo de alarmas por la medida y que solo resguardaban las fronteras venezolanas.
Sucedía que pocos días después, para el 23 de febrero de ese mismo año, estaba previsto el ingreso de la ayuda humanitaria a Venezuela, apoyado por Juan Guaidó, a quien decenas de países reconocieron como presidente encargado de Venezuela por considerar que Maduro está usurpando el cargo en Miraflores. El gobierno de Maduro evitó así que ingresaran a través del puerto de La Guaira, estado Vargas, los insumos que estaban almacenados en Willemstad, capital de Curazao, y que habían llegado a la isla desde Miami, Estados Unidos.
Relaciones ¿en luz naranja?
Las autoridades de las islas caribeñas Aruba y Curazao negocian con el gobierno de Venezuela la reapertura de la frontera marítima, así lo informó a finales de junio la primera ministra arubeña Evelyn Wever-Croes.
“Se han celebrado varias reuniones para discutir las posibilidades de ampliar los límites, reabrir y restaurar las relaciones comerciales y las oportunidades de viaje. En la actualidad, se adelanta la reapertura de la frontera marítima con Venezuela”, dijo la funcionaria de acuerdo con lo reseñado por Crónicas del Caribe.
Recuperación gradual del comercio
Wever-Croes confirmó asimismo que en las negociaciones participa Curazao. Y agregó que el enfoque del proceso de las conversaciones es principalmente la recuperación gradual del comercio marítimo y que la reactivación del paso facilitaría los procesos de expulsión y repatriación de migrantes venezolanos que han ingresado a la isla de forma ilegal.
Decenas de venezolanos que huyen del legado de Hugo Chávez han arriesgado sus vidas en embarcaciones no adecuadas que parten desde zonas del estado Falcón hacia Aruba, donde esperan conseguir mejores oportunidades de empleo y así ayudar a sus familiares que continúan en el país. Muchos ciudadanos incluso están desaparecidos o han fallecido porque los botes en los que viajaban zozobraron.
Amnistía Internacional y otras organizaciones defensoras de los derechos humanos han denunciado que las autoridades de Curazao y Países Bajos violan los derechos de los venezolanos que llegan a la isla. Las personas son sometidas a detenciones arbitrarias y en condiciones inhumanas, malos tratos, separación familiar y negación de su derecho a solicitar asilo. También se han denunciado deportaciones a su país de origen, aunque las personas puedan sufrir la infatigable persecución de las autoridades de Venezuela.
¿Fin de las restricciones aéreas?
El jueves 21 de julio circuló en las redes sociales la información de que Aruba finalmente eliminó las restricciones aéreas con Venezuela luego de que el abogado aeronáutico Rodolfo Ruiz había publicado en Twitter que la isla había eliminado un aviso oficial que restringía los vuelos desde el país gobernado por Maduro. Y señaló que la eliminación no necesariamente implicaba la reapertura plena de fronteras.
La publicación generó confusión y especulaciones. Tanto así que el gobierno de Aruba debió publicar un desmentido. “Circulan informaciones sobre el levantamiento de la restricción de vuelos entre Aruba y Venezuela. Esto no es correcto. Por favor, no contacte a su agente de viajes”, comunicó la Embajada de Países Bajos en Venezuela a través de su cuenta en Twitter.
Ruiz explicó después que la información estaba publicada en la página de la Administración Federal de Aviación del Departamento de Transporte de los Estados Unidos, donde no se observaba el aviso oficial, y agregó que el gobierno de Aruba publicó uno nuevo en el que anuncia la extensión de la restricción por tres meses. Es decir, las restricciones con Venezuela se mantendrán hasta finales de octubre.
“Nunca dije que se habían levantado las restricciones de entre y Aruba y Venezuela, tal y como reseñaron algunos diarios digitales (o al menos, esas no fueron mis palabras). Pero, en todo caso, humilde y responsablemente pido disculpas por cualquier confusión generada”, manifestó el abogado.
El gobierno de Aruba ha justificado en sus anuncios que el cierre de las fronteras con Venezuela se debe principalmente con las restricciones establecidas por la pandemia de coronavirus y para mantener el control de la criminalidad en la isla.