Activistas de derechos humanos hicieron este lunes una protesta creativa frente a la sede del Ministerio Público, en el centro de Caracas, para exigir la liberación de los cinco trabajadores de Azul Positivo, ONG dedicada a apoyar a pacientes con enfermedades de transmisión sexual.
Un grupo de ciudadanos, ubicados en la Plaza Parque Carabobo, pintó sus cuerpos de azul y posteriormente sostuvieron pancartas que, unidas, decían: «Nos faltan cinco».
A los cinco miembros de la organización los detuvieron el 12 de enero en el estado Zulia. Se encuentran bajo prisión preventiva en la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar.
La Comisión para los Derechos Humanos de Zulia señaló los delitos de los que son acusados: manejo fraudulento de tarjeta inteligente o instrumentos análogos, asociación para delinquir y legitimación de capitales.
Su defensa legal interpuso un recurso para exigir su libertad y calificó de arbitraria la detención.
El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida expresó recientemente su preocupación por la aprehensión de Johan León Reyes, Yordy Bermúdez, Layners Gutiérrez Díaz, Alejandro Gómez di Maggio y Luis Ferrebuz.
«Una sociedad civil fuerte y empoderada juega un papel central a la hora de dar los servicios que necesitan los más vulnerables. Y es crítica para progresar en la lucha contra la pandemia de VIH y otras amenazas sanitarias en Venezuela».