Nilsa Varela, periodista y propietaria del diario El Vistazo, interpuso una demanda penal por violencia de género contra el alcalde de El Tigre, Ernesto Paraqueima, y de su hijo, el director del medio de comunicación Mundo Oriental, Sandino Paraqueima.
La comunicadora social señaló que desde el primer trimestre del año 2022 se inició una campaña pública de incitación al odio en su contra, debido a una cobertura que realizó el diario sobre un conflicto con la compañía Fospuca.
La denuncia de 31 folios útiles, presentada el martes 9 de agosto de 2022 ante la Fiscalía 18 Especial contra la Violencia de Género de El Tigre, detalló que la periodista fue víctima de delitos como acoso y hostigamiento, además de violencia mediática y psicológica previstos en Ley Orgánica Sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia; así como otros delitos previstos en la Ley de Mensajes de Datos y Firmas Electrónicas, la Constitución Bolivariana, además de Jurisprudencias vinculantes de reciente data.
«Además de denunciar a padre e hijo, el texto entregado incluye denuncias contra otros hombres: Nelson Millán, director de Ambiente y encargado de mantenimiento de la Alcaldía; Williams Urquiola, director del Terminal Cleto Quijada y Orlando Marín, director de Promoción y Acompañamiento del Poder Popular del Despacho Municipal. Millán, es identificado como un promotor destacado, de todo tipo de imágenes humillantes y ofensivas que incluso contienen mis fotos personales. Urquiola y Marín también se esmeran en la promoción a través de WhatsApp. Ellos tres no son los únicos», indicó Valera en una nota publicada en El Vistazo.
El pasado 23 de mayo, El Vistazo hizo una denuncia ante el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa y el Instituto de Prensa y Sociedad. Rechazó cualquier asociación con grupos delictivos luego que múltiples funcionarios de la Alcaldía de El Tigre promocionaron imágenes donde manipulaban una noticia del diario relacionada con alias Rockola.
«Como mujer periodista y ciudadana venezolana, que diariamente ejerzo mi profesión con apego a la ética y a la legalidad vigente, aspiro que el Ministerio Público atienda mi denuncia y ordene las averiguaciones de rigor. He visto con un poco de lástima y pena ajena, cómo varios personajes de El Tigre agreden mujeres impunemente. Y la agresión, los que sabemos de Derechos Humanos, entendemos perfectamente que no sólo se trata de un golpe físico. La agresión también viene en esta presentación, a través de imágenes, apodos, comparaciones degradantes que nada tienen de inofensivas. Solo aspiro que no se sigan vulnerando mis derechos. La ley me ampara», concluyó Valera.
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