Este jueves, en horas de la noche, Nicolás Maduro amplió detalles del supuesto atentado que se estaba organizando en Colombia con la participación de Cliver Alcalá Cordones, general retirado del Ejército, y que supuestamente tenía como objetivo asesinarlo, así como a otros altos cargos de su régimen.
Maduro aseguró que Alcalá Cordones dijo en días pasados en una reunión que tuvo en la ciudad colombiana de Riohacha que debían prepararse para comenzar sus movimientos conspirativos en la noche más oscura de marzo.
«Él sabe que dijo así», afirmó Maduro en una cadena nacional, horas después de que Estados Unidos lo acusó formalmente de fortalecer el narcotráfico.
El socialista afirmó que el general retirado se mueve por las indicaciones que le da una bruja de Maracaibo, en el estado Zulia. Esta persona le habría recomendado el momento preciso para ejecutar el atentado contra Maduro.
«La bruja le dijo: ‘En el día más oscuro tú eres el dragón y saldrás para reverdecer en el tercer día y tomar el poder. El nuevo líder, Cliver Alcalá Cordones, el gran líder’. Traidor, desertor, narcotraficante, prófugo de la justicia. El diablo te está pagando como paga el diablo», expresó Maduro.
Cliver Alcalá: ni agraciado ni querido
La descarga contra Alcalá Cordones continuó. Maduro afirmó que el militar retirado no tenía gracia ni lo querían dentro de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana porque, según, era un patán que despreciaba a la gente y por otros motivos que no mencionó.
Dijo que la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos logró captarlo con el chantaje de un juicio por sus presuntas relaciones familiares con un narcotraficante de Barranquilla.
«Él es suegro o yerno del mayor narcotraficante de esa zona. Estaba en cosas raras; por eso lo apartamos de la vida militar. Después se supo de relaciones raras, de un matrimonio a todo dar en La Guajira, fotos con narcotraficantes y lo apartamos», subrayó Maduro.
El oficialista expuso que en Venezuela comenzaron a investigarlo y que por esta razón Alcalá Cordones se fue del país. «Íbamos a ponerle los ganchos», expresó.