Los rectores opositores del Consejo Nacional Electoral, Roberto Picón y Enrique Márquez, dijeron el jueves que esperan que el proceso de negociación entre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición encamine a Venezuela hacia la superación de la crisis.
«Esperamos que este nuevo ciclo de negociaciones encamine a Venezuela hacia la superación de la crisis multidimensional que mantiene a la gran mayoría de nuestra población en situación de extrema vulnerabilidad, y al país inmerso en una confrontación política que dificulta la búsqueda conjunta de soluciones«, expresaron en un comunicado publicado en Twitter, firmado por ambos.
Picón y Márquez señalaron asimismo que, como rectores del CNE, han insistido en la importancia de ofrecer garantías electorales y postelectorales.
Agregaron que, desde el nombramiento del nuevo directorio del ente electoral, se han enfocado en la ampliación de garantías electorales necesarias para avalar los procesos. Y que han comenzado a avanzar en la revisión de condiciones técnicas en el sistema automatizado de votación, en la actualización del Registro Electoral y en la aprobación y habilitación de tarjetas.
«Aún es necesario trabajar para alcanzar condiciones políticas satisfactorias, que necesariamente abarcan temas como la habilitación de líderes políticos para que puedan inscribir sus nombres como candidatos en las próximas elecciones regionales y municipales», manifestaron.
Para los rectores también es importante el uso equilibrado del espacio radioeléctrico y el respeto a los derechos humanos y políticos de cada uno de los actores del proceso electoral, sin persecución, detenciones arbitrarias y ningún tipo de amedrentamiento.
Consideran además que el cronograma electoral tiene un ritmo de ejecución distinto al de una negociación, que incluye una serie de aspectos medulares para la vida del país y que no podrán resolverse antes del 21 de noviembre.
Sin embargo, dijeron que es necesario que ambas agendas se desarrollen de manera simultánea y complementaria.
«La rehabilitación de los líderes políticos, la liberación de presos políticos, así como posibilitar el retorno de los exiliados podrían constituir gestos de buena voluntad que abonen a los avances de una negociación, y que también generarían condiciones políticas para una mayor participación en las próximas elecciones», sostuvieron.
El régimen venezolano y la oposición comenzarán una nueva ronda de negociación que tendrá como sede México y que está previsto que arranque este viernes.
El líder opositor Henrique Capriles Radonski confirmó el miércoles, en una rueda de prensa, la participación de su grupo y anunció que el secretario general de su partido Primero Justicia (PJ), Tomás Guanipa, estará en la delegación opositora.
En la misma, según explicó el líder opositor, también estará Stalin González, que no milita en PJ pero que ha mostrado su cercanía con Capriles y al que ya se unió para negociar con el régimen en 2020, unos diálogos que llevaron a la liberación de 50 presos políticos.
Igualmente, Nicolás Maduro confirmó el jueves que su hijo y diputado, Nicolás Maduro Guerra, será uno de los representantes del régimen venezolano en México, junto al presidente de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), Jorge Rodríguez.