El procurador de la República designado por Juan Guaidó, José Ignacio Hernández, se reunió con el embajador de Venezuela, también nombrado por Guaidó ante Canadá, Orlando Viera-Blanco.
Conversaron sobre las medidas que deben tomar para avanzar en la denuncia ante la Corte Penal Internacional en contra del régimen de Nicolás Maduro.
A su vez, evaluaron el alcance de las sanciones de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, hacia el régimen.
«Las sanciones no son un embargo en contra de los venezolanos, sino una prohibición de intercambio comercial y financiero contra el régimen de Maduro que impide que endeude más a Venezuela y asegura que no se ejecuten medidas de apropiación de nuestros bienes que se encuentran en suelo americano”, indicó Hernández.
Viera-Blanco destacó la forma en la que se han protegido los activos venezolanos en Estados Unidos y el mundo. Afirmó que el gobierno de Trump afectó al chavismo con las últimas sanciones.
“Estamos en presencia de un régimen desahuciado que perdió todo margen de maniobra y que pronto terminará de derrumbarse. Quien siga haciendo negocios con Maduro quedará fuera del orden económico internacional», dijo Viera-Blanco.