“Para salir de la crisis que vivimos debemos romper con los pilares de obediencia del régimen”, aseveró el diputado de la Asamblea Nacional, Miguel Pizarro, en un cabildo abierto celebrado en la urbanización Los Naranjos de El Hatillo.
Indicó que la gran manifestación del 23 de enero es para demostrarles a los oficiales de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana “que desde los cuarteles les dan el soporte de la fuerza al régimen político que usurpa el poder”, que el Parlamento es “garantía de futuro”, mientras que Maduro “no es garantía de nada”.
“Es tarea de todos hablarles y persuadir a los funcionarios y a la FANB, los dos pilares de obediencia del régimen. Nosotros no somos la venganza, ni la persecución. Este es el momento de tomar una decisión, aquí hay una mano abierta que les pide que den el paso, que dejen de ser leales al régimen”, agregó.
Cerca de 1.000 ciudadanos, al grito de un contundente “¡Sí!”, aprobaron el acuerdo del Legislativo que declaró: la usurpación de la Presidencia de la República por parte de Nicolás Maduro, el decreto de ley de amnistía y garantías para los funcionarios que ayuden a restituir el orden constitucional, el acuerdo de protección de los activos de la nación y la autorización del ingreso de la ayuda humanitaria.
“Es impensable que vayamos a amnistiar a los violadores de derechos humanos, eso no está planteado”, aclaró Pizarro.
La diputada Delsa Solórzano resaltó que no se le pide a la FANB que dé un golpe de Estado, sino que “deje de cumplir órdenes inconstitucionales y de matar al pueblo para rescatar juntos la Constitución”, conforme a sus artículos 333 y 350.
Aseguró que “la polarización de Hugo Chávez y Nicolás Maduro se acabó porque hoy son seis los que dirigen la dictadura usurpadora contra todos los demás, ya que el pueblo despertó y toda Venezuela se opone al régimen hambreador”.
El legislador Juan Andrés Mejía dijo que “no puede haber duda de que la legitimidad de la Presidencia recae sobre Juan Guaidó, presidente de la Asamblea, único poder legítimo”, como dicta la Constitución.
Aseguró que el acto es muestra de que Guaidó logró sembrar la esperanza que faltaba, la esperanza de un liderazgo nuevo, franco y honesto, que entiende la seriedad del momento que viven los venezolanos. “Logró unirnos en una sola causa que es la libertad de Venezuela”, expresó.
El parlamentario Carlos Prosperi agregó: “Tenemos que ponerle fin a la usurpación que Maduro trata de sostener, constituir una junta de transición y buscar garantías para unos comicios libres y transparentes, en los que se elija el destino de los venezolanos”.
“¡Sí se puede!”, “¿Quiénes somos? ¡Venezuela! ¿Qué queremos? ¡Libertad!”, fueron algunas de las consignas que corearon los hatillanos, quienes manifestaron su deseo de acompañar al Parlamento el 23 de enero en la calle.
Sabotaje
En un cabildo abierto realizado en Petare, un grupo de oficialistas, liderado por el presidente del Concejo Municipal de Sucre, “intentó sabotear la actividad”, informó Primero Justicia. Ante esta situación, la gente gritó la consigna: “Maduro sí se va”.
Más tarde, el presidente del Poder Legislativo presidió un multitudinario cabildo en las calles de la UD4 de Caricuao, donde los vecinos gritaban: “¡Libertad! ¡Libertad!”.
Cientos de venezolanos residenciados en Chile, con banderas de Venezuela, camisas y gorras tricolores, celebraron un cabildo en la Plaza Baquedano de Santiago, en la que participaron dirigentes políticos asilados.
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