Luis Vicente León, presidente de la encuestadora Datanálisis, indicó este jueves que la posibilidad de éxito del liderazgo opositor será nula mientras que actúen de manera desarticulada y conflictiva entre ellos mismos.
“Mientras los líderes opositores intentan conectar masas, escépticas y desilusionadas, de manera desarticulada y conflictiva entre ellos mismos. Sin propuestas, ni líder unitario, ni mecanismos consensuados para dirimir sus conflictos naturales, su posibilidad de éxito es nula”, publicó León en su cuenta de Twitter.
El presidente de Datanálisis aseguró que de no ocurrir la articulación en el liderazgo opositor se encontrará en una posición que calificó como muy comprometedora.
“Sin que ocurra la articulación indispensable entre esa fuerza (claramente mayoritaria), el resultado es que el liderazgo opositor, totalmente disperso y aparentemente perdido, se encuentra en una posición muy comprometedora: Todos empatados en la nada”, sentenció.
La crítica al gobierno y a otros opositores que piensan distinto no es ni eficiente ni suficiente para que la oposición, como conjunto, salga del hueco negro donde cayó. Su reto inicial es tener una propuesta y un liderazgo común, pese a sus diferencias. Sin eso…no hay nada.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) 20 de septiembre de 2018
Mientras los líderes opositores intentan conectar masas, escépticas y desilusionadas, de manera desarticulada y conflictiva entre ellos mismos, sin propuestas, ni líder unitario, ni mecanismos consensuados para dirimir sus conflictos naturales, su posibilidad de éxito es nula.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) 20 de septiembre de 2018
Y entonces, sin que ocurra la articulación indispensable entre esa fuerza (claramente mayoritaria), el resultado es que el liderazgo opositor, totalmente disperso y aparentemente perdido, se encuentra en una posición muy comprometedora: Todos empatados en la nada.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) 20 de septiembre de 2018
La población opositora es una clara y contundente mayoría que busca (y merece) cambio económico y político. Pero para convertirse en una fuerza real que provoque ese cambio necesita articulación, reglas de juego comunes para dirimir discensos y liderazgo único que mueva y motive.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) 20 de septiembre de 2018
Y qué creen qué pasa si el gob fortalece su control social e incrementa la dependencia a su reparto populista mientras la oposición se pulveriza y sus líderes hablan (y gritan) desarticuladamente (fuera y dentro) con mensajes contradictorios y ataques entre ellos? Dígalo usted.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) 20 de septiembre de 2018