La diputada a la Asamblea Nacional Adriana Pichardo denunció que siguen desaparecidas 10 mujeres que se encontraban privadas de libertad en la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, Dgcim, en Boleíta, y que fueron trasladadas este martes de manera irregular.
“Los presos políticos empezaron a exigir información acerca de las mujeres, dónde estaban y por qué no habían regresado. Es allí cuando inician una protesta activa, totalmente legal y constitucional dentro de sus derechos, así como a pedir la visita de la comisión de la ONU”, dijo.
Pichardo alertó de que todo indica que las damas fueron trasladadas a un sitio desconocido violando sus derechos, ya que ni su familia ni su defensa tienen conocimiento de su paradero.
“Cuando un preso es trasladado es llevado con sus pertenencias y con orden de un tribunal. Ellas fueron llevadas en bloque”, añadió.
La parlamentaria dijo que la Dgcim es un centro de tortura.
Este martes, Tamara Suju, defensora de derechos humanos, denunció que un grupo de presos políticos se enfrentó con sus custodios en los calabozos y que fueron amedrentados con escopetas de perdigones y gas lacrimógeno.