La justicia venezolana reclama a España la entrega del venezolano Nervis Villalobos como «máximo integrante» de una organización que movió en Andorra 2.000 millones de euros en comisiones, presuntamente de la petrolera Pdvsa, y a quien imputa una mordida de 1,8 millones de euros.
Sobre la petición de entrega a Venezuela, el abogado de Villalobos, Manuel Varela, explicó a Efe que aún no ha recibido notificación de la misma y que, en todo caso, su defendido se negará a ser entregado.
«Es difícil imaginar un proceso legítimo iniciado por un gobierno en general, y una fiscalía en particular, que el mundo reconoce como ilegítimo y en violación constante de derechos humanos», argumentó el abogado en alusión a las autoridades venezolanas.
Las acusaciones del gobierno de Venezuela se basan en informes de la Unidad de Inteligencia Financiera de Andorra, país europeo que supuestamente usaron los miembros del «grupo Salazar» para esconder el dinero de las comisiones de Pdvsa y donde varios de ellos, incluido Villalobos, han sido procesados por estos hechos.
Según la solicitud de extradición, estas mordidas se pagaron mediante sus cuentas y las sociedades panameñas que controlaban a la Banca Privada de Andorra, «por donde transitaron 2.000 millones de euros» (unos 2.260 millones de dólares).