Luego de 17 meses, las calles de Venezuela volvieron a llenarse con la presencia de los ciudadanos que gritan consignas en rechazo a Nicolás Maduro junto a nuevos líderes opositores gracias a las convocatorias de los cabildos abiertos.
«Estamos viendo un despertar, el silencio que había se ha transformado en energía y en fuerza. El 23 de enero tiene que ser un estruendo, un grito de libertad en toda Venezuela», dijo Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional (AN) y encargado de la Presidencia de la República, durante una de sus presentaciones en los cabildos hechos en la capital, reseñó El Mundo de España.
La AN ha realizados estos llamados para explicarle a los venezolanos de distintas partes del país cómo se llevará a cabo el proceso de transición, que tendrá un llamado general de protesta para el 23 de enero. Mientras, las reuniones con los venezolanos han causado reacciones debido al tiempo en el que no se hacían llamados de este tipo.
«¿Desde cuándo no se veía tanta gente en las calles gritando libertad?», preguntó el escritor Leonardo Padrón luego de que se hicieran virales en las redes sociales las fotos de las congregaciones en las ciudades de Caracas, Valencia (estado Carabobo) y San Cristóbal (estado Táchira).
Ante la actividad de las calles, los dirigentes políticos oficialistas han mostrado su preocupación, alegando que «la guarimba» no puede al país. Además, también realizarán una marcha el 23 de enero para conmmerorar la caída de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, ex presidente venezolano.
«La clave es el paso político dado por Guaidó. Factores objetivos los hay todos, pero faltaba el factor subjetivo, el político. Y surgió un actor inesperado que amenaza con llevarse por delante a los establecidos. Se trata del atrevimiento institucional de Guaidó», indicó Luis Salamanca, ex rector del Consejo Nacional Electoral.
El politólogo Piero Trepiccione señaló que las próximas horas son cruciales para la oposición y el oficialismo. «Las próximas horas y semanas muy probablemente nos lleven a una escalada conflictiva de muy alto nivel. Maduro tendrá que moverse como peso pluma si no quiere ser avasallado por este nuevo momento cumbre», apuntó.
Con información de El Mundo de España