El alcalde de Miami, Francis Suárez, le entregó este viernes las llaves de la ciudad a Fabiana Rosales, primera dama de Venezuela, y otro juego para Juan Guaidó, presidente interino del país.
«La ciudad de Miami está con ustedes», le dijo Suárez a Rosales durante un acto celebrado en la residencia privada de la empresaria y filántropa Adrienne Arsht, en la que resaltó la figura de Guaidó como la imagen de un ciclo de paz y de entendimiento mutuo.
«La paz y el amor serán restaurados, y la democracia prevalecerá», señaló Suárez, quien añadió que confía en que Guaidó le llevará paz a los venezolanos.
El presidente interino de Venezuela participó en el acto por medio de una llamada telefónica en la que agradeció la entrega de las llaves de la ciudad. «Que Dios los bendiga a todos ustedes», señaló.
Rosales agradeció al alcalde por el reconocimiento y aseguró sentirse aun más agradecida por lo que los líderes de varios países hacen por los venezolanos.
«Cada pronunciamiento, cada mensaje, cada ayuda hacia el pueblo venezolano es un acto de humanidad», dijo.
Durante el acto, Suárez leyó unas palabras del discurso de Václav Havel al papa Juan Pablo II, cuando lo recibió como presidente de Checoslovaquia, y le dijo al líder de la Iglesia católica que creía que su presencia ante él era un milagro.
El alcalde de Miami trajo a colación esa anécdota para hacer una relación con el surgimiento de Guaidó en Venezuela.
Suárez entregó a Rosales también un cuadro elaborado por la activista y exiliada cubana Ninoska Pérez Castellón, que retrata a la Virgen de la Caridad del Cobre (patrona de Cuba) con la bandera de Venezuela en el cuello, en representación de la diáspora del país en Miami.