Organizaciones no gubernamentales de Venezuela pidieron al jefe humanitario de la ONU, Martin Griffiths, quien se encuentra de visita en Caracas, mantener los programas de ayuda que se vienen implementando en el país en favor de las personas más vulnerables, informaron activistas este lunes a Efe.
«Hablamos de la necesidad de mantener en el radar humanitario a Venezuela como un país que aún tiene números y marcadores importantes que evidencian la existencia de una emergencia humanitaria», dijo el director de la ONG Convite, Luis Francisco Cabezas, que participó en una reunión con el funcionario.
Todo esto, prosiguió, «para hacerle frente a la narrativa que se ha querido imponer de que Venezuela se arregló», en alusión a la incipiente recuperación económica que ha registrado el país y que, según el gobierno, permitió un crecimiento de «dos dígitos» en el primer semestre, aunque hasta ahora el Ejecutivo no ha publicado el porcentaje exacto.
Ayuda humanitaria
Convite, organización que apoya a adultos mayores, recordó que 4,5 millones de personas que pertenecen a este grupo etario tienen dificultades para acceder a medicinas y alimentos y «muchos de ellos enfrentan la crisis en situación de soledad».
«Las personas adultas mayores compiten por la ayuda humanitaria en absolutas condiciones de desigualdad, especialmente en el acceso a la información, pues buena parte de la información se transmite vía tecnológica, en la que esta población tiene un rezago», explicó Cabezas.
Por ello pidió al jefe humanitario de la ONU incluir a los adultos mayores de Venezuela en los planes de respuesta de forma diferenciada «porque sus necesidades son bien específicas».
1) Nuestro Director General @luisfcocabezas asistió a reunión con el Secretario General Adjunto de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas Sr Martin Griffiths, en su intervención expresó la necesidad de incluir a las personas mayores de Vzla dentro de la respuesta humanitaria pic.twitter.com/mJEj1hv5v6
— Convite A.C (@conviteac) August 1, 2022
Daniella Inojosa, representante de la ONG Tinta Violeta, aprovechó el encuentro con Griffiths para pedirle que interceda ante el Estado y reitere que el trabajo de las organizaciones humanitarias «nada tiene que ver con política electoral».
La activista también habló sobre el dinero que tiene congelado Venezuela en el exterior -debido a disputas sobre la legitimidad del gobierno- y la oportunidad de usar esos recursos para ayudar a las personas con necesidades urgentes en el país.
Debe buscarse «una manera de que ese dinero pudiera ser usado para responder a la crisis, y que la ONU interviniera para recoger esos recursos y usarlos en la gente», sostuvo.
Griffiths, secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador del Socorro de Emergencia de Naciones Unidas, mantendrá reuniones con autoridades del Ejecutivo para impulsar la ayuda en el país.
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