Roberto Briceño-León, director del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), dice que en los últimos años la inseguridad no ha estado controlada y que al contrario esta puede ir en incremento en 2022.
«No ha estado más controlada la inseguridad, es que ha habido menos oportunidades para el delito de actuar» dijo en una entrevista en la emisora Onda.
Afirmó que uno de los estudios que hacían en el Observatorio Venezolano de Violencia era sobre el transporte público, en donde, según el OVV, se había evidenciado una baja de violencia.
«Los robos en el transporte público se hacían porque las personas tenían dinero, pero llegó un momento en que la gente dejó de tener dinero en efectivo y ya la gente sentía que no la iban a asaltar en el transporte público» destacó Briceño-León.
Incremento de la violencia
Explicó que aunque esa era una realidad, actualmente la situación va cambiando, esto debido a que ahora las personas están teniendo dólares lo que ha generado nuevamente asaltos.
«Hay que entenderlo en esas dinámicas. No es que ha mejorado la seguridad o que la policía ha mejorado su labor» dijo el director de la OVV.
Añadió que esto es parte de lo que ha sido la destrucción de la economía del país que ha llevado a unos repuntes en el delito.
Tipos de delitos frecuentes en Venezuela
Durante la entrevista se le preguntó al experto cuáles eran los delitos que volvieron a ser frecuentes en el país.
«Han regresado los robos, los asaltos y los secuestros de una manera relevante», detalló.
E igualmente se presentó un aumento «hacia otro sector: la extorsión, sobre todo hacia los comerciantes y empresas que venden en dólares».
El incremento se presenta en estados donde hay menor control del delito organizado y en otros casos, porque hay una mayor presencia de divisas.
Zonas del país con mayor incremento
Briceño-León añadió que las zonas donde ha aumentado la violencia «la región central ha aumentado, Carabobo, Aragua, Distrito Federal, Miranda, se ha dado un incremento bastante importante. En Delta Amacuro que parte del narcotráfico se ha movido hacia esa zona».
Asimismo, en «Monagas por la actuación de la industria petrolera, Sucre que también tiene que ver con el movimiento del narcotráfico, como hacia el sur del lago de Maracaibo, y el estado Trujillo».
El secuestro que había disminuido por pandemia y la ausencia de dinero en los venezolanos, apareció en sectores de medianos ingresos y comerciantes.
En cuanto a las bandas delictivas no se conoce cifras según el director del Observatorio Venezolano de Violencia.
Sin embargo, se sabe que muchas han generado alianzas con otras.
En zonas del país fronterizas la desarticulación de las bandas «no tienen que ver con acciones del estado, sino con la acción de otras bandas más poderosas o de la presencia de grupos guerrilleros colombianos que generan su dominio» destacó Roberto Briceño-León.