En Nueva Casarapa, entre Guarenas y Guatire, a solo 25 kilómetros de Caracas, viven 28.000 familias. Un proyecto modelo de urbanismo, con el paso del tiempo y las desacertadas decisiones de los gobiernos regional y local, ha visto cómo el deterioro ha hecho mella en sus espacios. Sobre todo, la crisis del agua, la que con suerte reciben una vez a la semana, tiene en vilo a quienes habitan en la populosa urbanización.
“Hay una sequía casi constante. Cuando no falla el agua entonces es la electricidad. Siempre estamos en una constante falla”, indicó Carlos Espinoza, presidente de Asocasarapa.
“Ya estamos en el límite. La gente está saliendo a protestar”, agregó.
Señaló que otro problema se suma debido a la escasez de agua: la instalación de tanques en las casas y edificios del urbanismo, lo que lleva al colapso de las estructuras porque son prefabricadas y no fueron hechas para soportar más peso. “Hay casas que se están agrietando y se hunden y apartamentos a los que incluso se les han atorado las puertas”, especificó.
El agua de Taguaza y Nueva Casarapa
El embalse de Taguaza es el principal abastecedor de agua de Guarenas, Guatire y zonas aledañas.
“No pasan 15 días sin que no halla averías”, señaló Espinoza. “Eso afecta sobre todo la parte media y alta de Nueva Casarapa”, puntualizó.
“Esta situación se ha venido agudizando porque no hay inversión. Aquí lo que se venido haciendo es que si se revienta una tubería entonces se corta y se remienda”, agregó.
Dijo que la solución que se ha planteado es recurrir al abastecimiento por camiones cisterna, lo que es una propuesta que rechaza la comunidad: “La alcaldía tiene una cisterna para toda Nueva Casarapa, por ejemplo, y llega solo a sectores donde hay empleados de la alcaldía. Además, mucha gente no tiene cómo almacenar agua en sus casas y para los edificios eso es algo imposible”.
Reveló que una cisterna pequeña de un privado puede costar 120 dólares.
Cronograma de distribución del agua en Guarenas y Guatire de la semana del 11 al 17 de enero, distribuido por cuentas de WhatsApp
Abandono de los entes públicos
Espinoza explicó que la comunicación con Ernesto Borrais, gerente general de Hidrocapital en Guarenas y Guatire, se ha deteriorado con el paso del tiempo. “Las mismas promesas que hizo hace seis años las repite ahora”, dijo.
Asimismo indicó que el alcalde del municipio Plaza, Luis Carlos Figueroa, solo reconoce en Nueva Casarapa la intermediación de una Unidad de Batalla Chávez (UBCH), lo que condiciona asimismo el alcance de los acuerdos y la operatividad de las decisiones.
“Son ocho propietarios del partido de gobierno que controlan el transporte, la laguna de Nueva Casarapa, los buhoneros, los camiones que venden verdura. Las asociaciones de vecinos no contamos para el alcalde”, manifestó.
“Si hablamos de los servicios públicos podemos decir que estamos en el abandono total. No hay ni un bombillo que funciones del alumbrado público y tampoco recogen la basura”, recalcó.
También hizo énfasis en el problema de inseguridad. “Los cuerpos de seguridad solo aparecen cuando salimos a protestar”, dijo.
“El alcalde no hace nada por la comunidad y no permite tampoco que hagamos”, subrayó.