La delegación de Noruega que arbitra el diálogo entre el gobierno y la oposición de Venezuela reafirmó este sábado su «imparcialidad» en el proceso después de que la primera ministra noruega, Erna Solberg, expresara su preocupación por los derechos humanos en el país.
«Lamentamos que la reciente declaración en la ONU pueda afectar la confianza en nuestro papel. Es fundamental que este proceso y negociación sea entre los propios venezolanos sin ninguna interferencia indebida», expresó a la prensa el representante de la delegación noruega, Dag Nylander.
Nylander, presente en la tercera ronda de negociaciones en Ciudad de México, reafirmó la «estricta imparcialidad con las partes» y reconoció «los resultados alcanzados en las rondas previas».
Las declaraciones de la primera ministra noruega en la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York habían encallado el inicio de esta tercera ronda de contactos.
Tras el mensaje del árbitro noruego, el representante de la delegación chavista, Jorge Rodríguez, compareció ante la prensa para dar «por superada esta situación».
«Estábamos a la espera de que esta situación pudiera ser subsanada a los efectos de reanudar el proceso», dijo Rodríguez, también presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela.
La delegación del gobierno de Nicolás Maduro llegó este sábado a México con un día de retraso para reanudar el diálogo con la oposición venezolana.
El papel de Noruega
La tercera ronda de los diálogos, que se llevan a cabo en un hotel de Ciudad de México con el arbitraje de Noruega, debía comenzar el viernes, pero la delegación chavista no se presentó.
Aunque el gobierno no justificó su ausencia, la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, arremetió el viernes en redes contra el embajador de EE UU en el país, James Story, a quien acusó de dar órdenes a la oposición «sobre qué hacer en la mesa de diálogo».
Fue el representante de la delegación opositora, Gerardo Blyde, quien informó el viernes por la noche a través de un comunicado que los chavistas no habían acudido a la reunión.
A pesar de dicha ausencia, Blyde ratificó «el «compromiso» de la oposición de «continuar la negociación sobre la agenda acordada».
Durante los días previos, el ambiente se enrareció después de que el gobierno venezolano anunciara por sorpresa el nombramiento del empresario colombiano Alex Saab como miembro de su delegación, pese a estar preso en Cabo Verde, a la espera de si lo extraditan a Estados Unidos.
La delegación chavista aterrizó este sábado en México con pancartas con el rostro de Saab que exigían su liberación.