La Seccional de Carabineros y Protección Ambiental de la Policía Metropolitana de Cúcuta, Colombia, informó que uno de sus caninos detectores de estupefacientes, una perra llamada Nika, evitó el ingreso de más de siete kilos de droga a través de la frontera de Venezuela.
Las autoridades indicaron que los estupefacientes se hallaban ocultos en resmas de papel, pero el agudo olfato de Nika detectó lo que se encontraba oculto en el paquete de una empresa de envíos.
El jefe de la seccional señaló que los paquetes de droga detectados por Nika tenían como destino Venezuela.
«El trabajo de nuestros caninos detectores es fundamental en la lucha contra el tráfico de estupefacientes, han demostrado ser una valiosa herramienta en la detención del alcaloide», dijo el funcionario en declaraciones citadas por el diario La Nación.
En total, fueron incautados 7,4 kilos de droga.