Con la llegada de la variante ómicron a Venezuela, los equipos de la organización Médicos Sin Fronteras (MSF) evidencian el aumento de casos de covid-19 que han sido reportados oficialmente en el país durante las últimas semanas. Y aunque en general los síntomas se reportan más leves que en olas anteriores, el gran número de positivos empieza a tener también reflejo en la cifra de personas hospitalizadas.
MSF tiene operaciones dedicadas exclusivamente a la atención de covid-19 en el Hospital Vargas y en el Hospital de Lídice, ambos en Caracas. Allí acondicionó espacios y estableció circuitos seguros de tamizaje y triaje para pacientes con síntomas relacionados con la enfermedad. Amplió la capacidad de camas para la hospitalización de pacientes moderados, graves o críticos y garantizó insumos médicos, obras de infraestructura y equipamiento de todos los espacios.
El abordaje, además, incluye el componente de salud mental para brindar apoyo a los pacientes, a sus familiares e incluso al personal médico que debe trabajar bajo fuertes niveles de presión. De hecho, la infraestructura de estos centros se fortaleció contratando personal de MSF para reforzar la atención médica.
Más de 50 camas habilitadas para el covid-19
Hay un total de 54 camas de hospitalización disponibles para covid-19 en los dos hospitales, 44 están ocupadas. En la UCI, 3 de 4 camas disponibles están ocupadas. En las últimas dos semanas, un total de 2.800 pacientes han pasado por el triaje respiratorio de ambos centros asistenciales.
La organización trabaja en Venezuela desde 2015. Además de Caracas, cuenta con proyectos en Amazonas, Anzoátegui, Bolívar, Miranda y Táchira, donde también se han implementado sistemas de triaje seguros para tratar posibles casos de covid-19.
MSF es una organización médica humanitaria imparcial, neutral e independiente que labora en más de 70 países. Sus fondos provienen de donaciones privadas en todo el mundo.
Con información de nota prensa