Cerca de 300 familias en Los Flores de Catia están en riesgo debido a las fuertes precipitaciones de los últimos días en Caracas, así lo dio a conocer este jueves el jefe de gobierno de Distrito Capital, Nahum Fernández.
El funcionario ofreció un balance en el cual resaltó que la cifra puede llegar a 500 familias afectadas ante emergencias reportadas en otros sectores de la ciudad. De momento, 83 familias en Los Flores de Catia están desalojadas de sus viviendas por seguridad y resguardadas bajo la protección de organismos de seguridad, según el reporte de Fernández.
Por su parte, en la Parroquia Altagracia han atendido a 22 familias en el sector La Vaquera. Mientras que en el Junquito el funcionario informó sobre el desalojo de 32 familias. Estas personas vivían en construcciones ilegales en zonas de alto riesgo.
Por ahora, según las autoridades locales, no se han reportado pérdidas humanas debido a los trabajos de previsión en localidades de la ciudad. «Hemos presentado la alternativa de sacar a la gente con suficiente tiempo y por eso no tenemos pérdidas de vidas humanas», agregó el jefe de gobierno del Distrito Capital.
Por ello y tras las emergencias por la temporada de lluvias en la ciudad, Nicolás Maduro prometió el miércoles construir viviendas nuevas para las familias afectadas por los derrumbes ocasionados por las lluvias en Los Flores de Catia.
«Ya esa gente está protegida. Les vamos a construir su casa nueva a cada uno para que tengan su casa fortificada y su familia segura. Que tengan su techo seguro», dijo en transmisión por VTV.
Maduro aseguró que su despacho está trabajando coordinadamente con todos los gobernadores para la atención de los daños causados por las lluvias.
Lluvias dejan incontables daños
Varias zonas del país han resultado afectadas por las fuertes lluvias de las últimas horas. El presidente del Inameh, José Pereira explicó esta semana que las precipitaciones se generalizaron en todo el territorio. Principalmente en el Sur del Lago de Maracaibo, Mérida, Trujillo, Portuguesa, Barinas, Lara, parte de Falcón, Yaracuy, Apure y Distrito Capital.
Los desbordamientos de ríos y quebradas, y la falta de mantenimiento de los desagües y de los canales de drenaje, sumado a una descarga superior de agua, han provocado la inundación de calles y avenidas, cientos de casas, establecimientos comerciales y sembradíos.
Además, autoridades regionales han reportado la rotura de diques o muros de contención y la crecida ha dejado en las vías lodo, árboles y escombros.