María Corina Machado, líder de la oposición venezolana, recibió este martes de forma virtual el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia del Parlamento Europeo, un galardón que comparte con el candidato presidencial Edmundo González Urrutia.
En su discurso, que dio de forma virtual, expresó su convicción en la victoria de los venezolanos: «Sabemos que vamos a triunfar».
Con emoción, dedicó el premio a millones de venezolanos que, dentro y fuera del país, han luchado durante más de 25 años por la libertad y la democracia. Agradeció a quienes reconocen esta lucha y destacó que, a pesar de los esfuerzos del régimen, el pueblo ha demostrado valentía, resiliencia e inteligencia.
«Este pueblo ha dado testimonios infinitos de amor por nuestra tierra y nuestra libertad», destacó.
Ana Corina Sosa, hija de la líder opositora María Corina Machado, y el candidato Edmundo González Urrutia recibieron el Premio Sájarov. Foto: Ronald Wittek / EFE
Recordó cómo Venezuela, que alguna vez fue la democracia más estable y próspera de América Latina, se sumió en la miseria tras ser tomada por «un régimen aliado con los autócratas más peligrosos del mundo».
El chavismo, según la dirigente opositora, utilizó tácticas de división interna y explotación económica para debilitar a la sociedad venezolana. Sin embargo, Machado señaló que los ciudadanos se han levantado con un movimiento que busca la unidad y la regeneración de la nación.
«Lo que logramos el 28 de julio es imparable»
En su mensaje, también subrayó la magnitud de lo logrado el 28 de julio de 2024, cuando se llevaron a cabo elecciones que, a su juicio, trascienden la política local.
«Lo que logramos ese día no fue solo un evento electoral, sino un movimiento social y cultural que ya es imparable», afirmó.
La líder opositora enfatizó además que lo que sucede en Venezuela tiene implicaciones globales, no solo por la influencia del régimen en América Latina, sino por las consecuencias para la estabilidad de Occidente.
El discurso de Machado estuvo marcado por un llamado a la solidaridad internacional, especialmente con los presos políticos de Cuba y Nicaragua, a quienes también se comprometió a liberar cuando ocurra la transición en Venezuela.
«Nuestra lucha no tiene fronteras», dijo.