El gobierno de Nicolás Maduro rechazó este martes la ronda de licitación de bloques petrolíferos que, aseguró, lleva a cabo Guyana disponiendo de áreas marítimas que se encuentran dentro de la zona en disputa entre ambos países, un territorio de 160.000 kilómetros cuadrados.
En un comunicado, el Ejecutivo de Nicolás Maduro rechazó enérgicamente esta ronda de licitación de Guyana, al considerar que «la misma pretende disponer de áreas marítimas pendientes de delimitación entre ambos países».
«El gobierno de Guyana no posee derechos soberanos sobre estas áreas marítimas y, en consecuencia, cualquier acción en sus límites es violatoria del derecho internacional, mientras no sean llevadas a cabo a través de un acuerdo con Venezuela», dice la nota.
El Ejecutivo tildó de inaceptable este proceso y aseguró que cualquier concesión ilícita y arbitraria que otorgue Guyana en la zona en disputa viola los derechos soberanos de Venezuela.
Advirtió que las acciones del gobierno de Guyana «no generan ningún tipo de derechos a los terceros que participen en dicho proceso».
El gobierno prepara la defensa que debe presentar ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) luego de que en abril pasado esta instancia declarara que tiene jurisdicción para pronunciarse sobre la pugna entre Venezuela y Guyana, y rechazara los argumentos presentados por el Ejecutivo de Maduro que pretendían mantener el asunto fuera de la Corte.
En diciembre de 2022, Guyana inició la primera ronda de licitación de bloques petrolíferos, que cerró el pasado 12 de septiembre y cuyo resultado fue calificado como un «éxito» por el vicepresidente y responsable del sector petrolero, Bharrat Jagdeo.
Seis empresas, entre ellas la estadounidense ExxonMobil, presentaron ofertas en la licitación, que incluía 11 bloques en aguas poco profundas y tres en aguas profundas.