Nicolás Maduro anunció este viernes la creación de un centro internacional de inversiones con el que espera atraer capitales locales y extranjeros que impulsen la economía nacional, actualmente 90% más pequeña que en 2013.
«Se crea el centro internacional de inversión productiva para que vengan capitales nacionales, internacionales, privados, públicos, venga todo el que quiera invertir en Venezuela, en donde quiera invertir, en lo que quiera invertir», dijo tras recibir la «ley antibloqueo», aprobada por la asamblea nacional constituyente (ANC).
En un acto transmitido por el canal estatal VTV, Maduro agradeció a la ANC, integrada solo por oficialistas y no reconocida por varios países, por haber dado luz verde en menos de dos semanas a esta ley que, aseguró, él mismo redactó y propuso, y con la que el régimen busca burlar las sanciones económicas impuestas, especialmente desde Estados Unidos.
El nuevo centro de inversión, dijo, se crea a la luz de la llamada «ley antibloqueo» y busca hacer crecer el producto interno bruto (PIB), un indicador que lleva casi 30 meses de contracción y que ha reducido el tamaño de la economía venezolana 90%, según estimaciones de la ANC.
Maduro espera que este centro, que estará presidido por el hasta ahora presidente del Banco de Comercio Exterior, Héctor José Silva Hernández, cree proyectos que permitan la generación de nuevas riquezas, pues, según él mismo dijo, el país percibe menos de 1% de lo que recibía en 2013 por venta de su ingente petróleo.
«La ley antibloqueo nos da todas las herramientas para que nosotros podamos avanzar», insistió sobre este instrumento que autoriza al régimen para inaplicar normas legales «cuando resulte necesario».
Detener sanciones
Maduro instó a los ciudadanos a pedirle a varios dirigentes de la oposición que «cesen en su llamado al bloqueo y a la intervención en Venezuela».
«Hay que exigírselo en la calle, ponerle rostro a los responsables del sufrimiento de Venezuela», remarcó.
Entre esa lista de personas están, según Maduro, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por más de 50 países, los diputados Henry Ramos Allup y Julio Borges, el excandidato presidencial Manuel Rosales y Leopoldo López, que se encuentra como huésped en la residencia del embajador español en Caracas.
«La ley antibloqueo es nuestra respuesta a la crueldad de las tortura de las sanciones criminales de EE UU, promovida por un puñado de políticos malintencionados, malvados, muy corruptos, de la derecha venezolana», expresó.
Consideró además que los dirigentes de la oposición venezolana «están partidos en mil pedazos pero con mucho dinero que le han robado a este país».