Nicolás Maduro aseguró el domingo haber resistido con éxito varios ultimátum para sacarlo del poder. Auguró que su aliado Evo Morales, cuya reelección es cuestionada por la oposición en Bolivia, también saldrá airoso.
“Le dije a Evo: a mí me han dado este año como 10 ultimátum. Maduro, 24 horas, te vas o te tumbamos. Ven y túmbame pues, le digo yo”, contó Maduro, quien acudió a la clausura del denominado encuentro antimperialista en La Habana.
Allí compartió la mesa con el líder socialista cubano Raúl Castro y el gobernante Miguel Díaz-Canel.
En el encuentro, Maduro expresó su apoyo a Morales, reelecto para un cuarto período en Bolivia. El venezolano recordó que el opositor boliviano Luis Fernando Camacho dio un ultimátum a Morales para que renunciara en 48 horas.
Camacho también llamó a los militares a intervenir en la crisis desatada tras el polémico escrutinio de las elecciones del 20 de octubre, que ganó Morales en contienda con el ex gobernante Carlos Mesa.
Aseguró que en Bolivia hay “una derecha racista y fascista peor que la venezolana, y con el apoyo de Estados Unidos, todo lo han intentado y no han podido. El indio Evo va a resistir y va a triunfar contra esta amenaza racista”, dijo.
En su discurso, Maduro también felicitó a Chile por las protestas que se suceden en ese país desde hace más de dos semanas, en la peor crisis social que vive la nación andina desde que recuperó la democracia en 1990.
“Chile despertó y es muy emocionante ver el despertar de Chile”, dijo Maduro, y consideró que es una vergüenza para todos los latinoamericanos que en ese país aún esté vigente una Constitución aprobada por la dictadura de Augusto Pinochet.