VENEZUELA

Ley de Protección de las Pensiones puede conducir a la quiebra a miles de empresas, según economista

por Avatar El Carabobeño

La Ley de Protección de las Pensiones de Seguridad Social, recientemente aprobada por la Asamblea Nacional, podría conducir a la quiebra a miles de empresas, advierte el economista y dirigente político Melvis Humbría.

Esa ley obliga al sector privado a cancelar al Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) hasta 15% del salario mensual de sus trabajadores, lo cual  representa una nueva carga impositiva que se sumaría a las existentes.

Humbría considera que el nuevo tributo obligatorio agravaría la carga fiscal representada hoy por los impuestos y tasas municipales, los cargos estadales; además de lo causado por el impuesto sobre la renta, el impuesto a las grandes transacciones financieras, el impuesto al valor agregado y lo correspondiente al Fondo Nacional de Ciencia Tecnología e Innovación (Fonacit).

Indicó que existen otras erogaciones que deben hacer los empresarios, entre ellas las contribuciones a Ley Orgánica de Drogas y a la Ley Orgánica del Deporte, así como los aportes al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales y al Banco Nacional de Vivienda y Hábitat, además de los gastos en aranceles y tasas por los servicios aduaneros.

Pensiones le corresponden al Estado

A juicio del economista, la nueva carga impositiva será trasladada al consumidor final y por ende se producirán mayores niveles inflacionarios.

Apuntó que si bien es cierto que el monto mensual de las pensiones que devengan más de 4 millones de venezolanos no cubre las necesidades básicas y que los adultos mayores son los más afectados por la profunda crisis económica, le corresponde al Estado y no al empresariado el mejoramiento de las pensiones.

Dijo que insistir en que los que más sufrieron en el pasado las expropiaciones de fincas, tierras y empresas productivas asuman este nuevo costo operativo es un error.

“Esa destrucción del aparato productivo que se inició en 1999 llevó al país a una caída vertiginosa de nuestro nivel de vida que todavía persiste”, afirmó.

Aseguró que las cifras hablan por sí solas, pues hoy 82% de los venezolanos son pobres y 53% sufre de pobreza extrema; el producto interno bruto sufrió caída de 80% en 9 años y las reservas se desplomaron estrepitosamente.

“Esto evidencia que lo que menos le importa a quienes gobiernan es la solución de los problemas que padece la mayoría de la población. Todos sus esfuerzos están dirigidos a mantenerse a como dé lugar en el poder, lo que puede revertirse si los venezolanos acudimos en masa a votar el próximo 28 de julio por una alternativa de cambio ya que con Maduro no hay futuro”, expresó.