VENEZUELA

Leopoldo López rechaza denuncias de corrupción presentadas por Tarek William Saab

por Avatar EFE

El líder opositor venezolano Leopoldo López desmintió este lunes estar vinculado al caso de supuesta corrupción Pdvsa-Cripto, después de que el fiscal general, Tarek William Saab, lo relacionó con «una conspiración política» -junto con Julio Borges, Carlos Vecchio y Carlos Ocariz- con conexión a esa trama.

«La dictadura, siempre inventando e intentando desviar la atención», señaló en rueda de prensa online en la que presentó su investigación para el Wilson Center de Washington «Crypto en Venezuela: Dos caras de una moneda», en el que analiza la manera como esta herramienta ha sido utilizada en el país.

Según el fiscal, los opositores mencionados, en connivencia con Estados Unidos y El Aissami, planeaban «disolver el Estado por cualquier vía antidemocrática, imponer y continuar con las sanciones que tanto daño le han hecho al humilde trabajador y a las empresas».

Durante la explicación de su estudio, el político caraqueño aseguró que el gobierno de Nicolás Maduro utilizó las criptomonedas para «evadir sanciones, lavar dinero y profundizar en la corrupción», por lo que considera que el sistema financiero del país es vulnerable y que está «enjaulado y controlado».

De todas formas se mostró «entusiasmado» para las elecciones presidenciales que se celebrarán en Venezuela el 28 de julio, puesto que cree que la mayoría de la población «votará a favor del cambio» para acabar con la «dictadura» de Maduro.

«Estamos comprometidos con la ruta electoral», aseguró el líder del partido Voluntad Popular (VP), a la vez que recalcó su apoyo a Edmundo González Urrutia, el candidato ratificado de Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la principal coalición opositora de Venezuela.

«Los venezolanos queremos votar a favor del cambio. Muchas encuestas dicen que la intención de voto es mucho mayor que en los últimos 15 años porque hay una movilización gigantesca», apuntó López.

El opositor está exiliado en España desde 2020, después de ser condenado a más de 13 años de cárcel por apoyar las manifestaciones opositoras de 2014 contra Maduro.