La oposición de Venezuela, agrupada en la Plataforma Unitaria, respaldó este viernes la decisión de la Comisión Nacional de Primarias (CNP) de llevar a cabo las elecciones internas, previstas para el 22 de octubre, de manera «autogestionada», tras la renuncia de la mayoría de los rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE).
«En nombre de la Plataforma Unitaria le damos nuestro pleno respaldo, nuestro pleno apoyo a esta decisión, que no es otra cosa que la confirmación de que no nos equivocamos, que tenemos una Comisión Nacional de Primarias que se ha venido preparando en cualquier escenario». Así lo indicó Juan Carlos Caldera, integrante del partido Primero Justicia, en rueda de prensa.
Oposición respalda primaria autogestionada
Asimismo, dijo que hacer las primarias sin la asistencia técnica del CNE permitirá construir la unidad desde las bases, aunque advirtió que seguirán presentándose dificultades.
«La primaria autogestionada nadie ha dicho que va a ser fácil, nada ha sido fácil en Venezuela y esto no va a ser distinto, pero lo que sí va a ser es posible», añadió.
El opositor ofreció a la Comisión Nacional de Primarias todo el equipo técnico y humano de todas las organizaciones políticas que integran la Plataforma Unitaria para lograr el éxito de estos comicios internos.
La CNP informó este viernes que no contará con el apoyo técnico del CNE para las primarias previstas para el 22 de octubre, luego de que tres de los cinco rectores principales del ente estatal renunciaran al cargo.
«Avanzaremos con la organización de una primaria autogestionada», dijo en una conferencia de prensa el presidente de la CNP, Jesús María Casal, quien aclaró que para el momento en el que se conoció la renuncia de la mayoría de los rectores del CNE, la oposición no contaba, todavía, con un acuerdo «refrendado» sobre la posible asistencia técnica de este ente en el proceso.
Explicó que se trata de un escenario en el que la CNP ha trabajado «desde hace varios meses», aunque reconoció que la ubicación y establecimiento de centros de votación es una tarea «muy exigente», cuyo éxito dependerá de «una actitud de cooperación activa por parte de todos los factores políticos».