El Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (ONU) anunció este martes que expandirá su programa de alimentación escolar en Venezuela hasta alcanzar a un millón de niños en 2023, una meta para la que necesita 190 millones de dólares de financiamiento humanitario.
El director ejecutivo del WFP, David Beasley, concluyó hoy una visita de dos días al país en la que revisó parte de los proyectos implementados, se reunió con representantes diplomáticos y mantuvo una reunión privada con Nicolás Maduro.
En una nota de prensa, la organización explicó que el estadounidense visitó el estado Sucre, donde «se reunió con personal docente, familias y estudiantes durante una distribución de alimentos en dos centros educativos, así como con autoridades locales».
La ONU y el Programa Mundial de Alimentos
«El Programa Mundial de Alimentos agradece a todas las partes por brindar oportunidades a los niños en Venezuela. Podemos y haremos mucho más por las personas en el país», dijo Beasley, citado en la nota de prensa, en la que se explica que la expansión de operaciones «incluirá las temáticas de desarrollo y resiliencia».
«Las personas me han contado que nuestro programa de comidas escolares ha hecho la diferencia para ellas. Les ayuda a ocuparse de otras prioridades, sabiendo que al menos los alimentos básicos están garantizados», añadió.
Sobre la reunión con Maduro, el WFP aseguró que sirvió para acordar el aumento en el número de beneficiarios, que actualmente incluye 430.000 personas que reciben canastas de alimentos para llevar a casa en 8 de los 23 estados del país.
La organización comenzó operaciones en Venezuela en abril de 2021 y ha ido creciendo en cuanto a su alcance, que espera llevar hasta 16 entidades en 2023.