Las recientes sanciones impuestas por Estados Unidos contra Venezuela han impactado al régimen de Nicolás Maduro, al punto de llevarlo a ausentarse de los encuentros pautados en Barbados en el marco de las negociaciones con mediación de Noruega, afirmaron algunos analistas.
El presidente Donald Trump firmó el pasado lunes una orden ejecutiva que establece el congelamiento de las propiedades estatales de Venezuela en suelo norteamericano y prohíbe las transacciones con la cúpula gobernante.
A juicio de algunos analistas políticos esta medida de presión representa “el cerco político, económico, financiero y comercial total” contra el Ejecutivo, razón por la cual se ha visto obligado a retirarse del proceso de negociación para reconfigurar su estrategia ante un escenario decisivo.
“Se retiran no porque quieren sino porque necesitan buscar una estrategia inmediata que pueda ir contra una medida que, de una u otra manera, les está haciendo daño”, señaló Marco Hernández López, director de la encuestadora Hercon Consultores.
Indicó que ante estas sanciones, que han ido “desmontando de manera sistemática, lenta pero efectiva, a una revolución en decadencia”, el régimen tuvo que abandonar una postura «leninista, la cual consiste en ir un paso hacia adelante y dos hacia atrás en un proceso de negociación que utiliza para obtener oxígeno en su decisión de aferrarse al poder».
Para Hernández el chavismo ha tomado conciencia de que estas sanciones no solo lo afectan a él sino que también tendrán impacto en los intereses económicos de Rusia, China y Cuba, a los que les han dado los recursos de la nación a cambio “de la defensa de un señor ambicioso que se aferra al poder con una minoría”.
“Estas sanciones les harán daño a los intereses exógenos que mantiene el régimen y cuando tú tocas intereses económicos estás tocando la médula espinal, el móvil de las grandes guerras que llevan a divisiones internas, traiciones y a la reconfiguración de posturas”, explicó.
El politólogo Daniel Arias indicó que con estas medidas económicas por parte de Estados Unidos se “adelantó la batalla final”, que se veía venir ante la negativa de Diosdado Cabello de aceptar el diálogo: “Con estas sanciones su posición política agarra una fuerza increíble y cierra la batalla interna, ya que su posición es la que se va a imponer”.
Ambos expertos coincidieron en que la cúpula gobernante puede terminar volviendo al proceso de negociación en vista de su debilidad política y económica, por lo que las decisiones que tome en las próximos días serán decisivas.
“Están obligados a negociar y conseguir un acuerdo con la oposición o llevar la batalla política a sus últimos términos para tratar de ganarla antes de que se produzca una intervención militar, lo cual sería definitivamente el final del régimen y una tragedia social e histórica para los venezolanos por los costos políticos y sociales que pudiera tener”, precisó Arias.
La radicalización del chavismo
Los analistas aseguraron que el régimen se radicalizará ante este nuevo escenario político, por lo que puede comenzar una arremetida policial, política y de inteligencia contra toda la dirigencia opositora, incluidos diputados.
El papel de la asamblea nacional constituyente, dirigida por Cabello, tiene un papel fundamental, dado que desde esta instancia, calificada de ilegítima, se han justificado las medidas adoptadas por Maduro y la persecución en contra de los parlamentarios, indica Arias.
“En la próxima sesión de la ANC pueden tomar medidas extremadamente graves, que podrían ir desde declarar estado de guerra hasta suspensión de derechos económicos y políticos, por esta razón”, explicó.
Resaltó que el riesgo de las decisiones que se tomen desde la ANC es inmenso, debido a que “si se equivocan en sus cálculos, la contraofensiva puede ser una intervención militar”.
Agregó: “El chavismo irá a una apuesta política del todo o nada, puesto que si hay invasión lo pierden todo, y si no, acaban con la oposición, asumen el control total del país, aunque quedé arruinado desde todo punto de vista, para gobernar sobre las ruinas económicas de una sociedad colapsada”.