Desde principios de año los casos de covid-19 en el país se triplicaron y en enero alcanzaron la cifra más alta desde que se inició la pandemia en 2020, aseguró el epidemiólogo José Félix Oletta.
El exministro de Salud dijo en una entrevista con El Nacional que los números presentados por el gobierno son tan solo “una pequeña muestra de la realidad, y se anuncian de manera atrasada».
La cifra de casos registrados en diciembre, señaló, fue de «12.690, la misma se multiplicó 3,2 veces más en el mes de enero y llegó a 41.339”.
Cifras incompletas por falta de pruebas covid-19
«Para ofrecer una respuesta oportuna es necesario mantenerse informado», dijo el médico en cuanto a la operatividad del sistema de salud.
“Hay personas que se quedan fuera de las estadísticas por falta de pruebas. Desde el 4 de abril de 2021 no se ofrecen datos sobre las pruebas realizadas; esto deja un vacío importante en los datos”, indicó.
Asimismo destacó que pasaron 22 meses para que el gobierno incorporara las pruebas con resultados positivos realizadas en laboratorios. Lo cual es un indicativo de que “no había voluntad para introducir las pruebas en los casos”.
Casos de covid-19 sin diagnosticar
Venezuela es de los pocos países que no ha impuesto regulaciones para la denuncia obligatoria sobre casos de covid-19, señaló.
Además, el hecho de que no aparezca en Gaceta Oficial “es otra falla y muchos casos se quedan sin diagnosticar”.
De igual forma, consideró que se debería realizar la “Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) con el código específico de covid, que tampoco se está registrando. La data no traduce la situación”.
Oletta apuntó que se registran 1.800 casos por día: «Es un volumen importante de casos, sin embargo, no hay data suficiente para decir qué está ocurriendo en todo el país”.
Esto se debe a que hay estados donde los casos son bajos en comparación con entidades de mayor población como Miranda y Distrito Capital.
Pacientes en cuidados intensivos se incrementaron
Según los datos aportados por la comisión presidencial, del 1 al 31 de enero el número de pacientes por covid-19 en cuidados intensivos con insuficiencia respiratoria severa pasó de 122 a 258, un incremento de 111% (2,1 veces más).
En cuanto al porcentaje de camas de UCI ocupadas por pacientes con covid, aumentó 75%, según muestra recogida por la organización Médicos Sin Fronteras basada en los hospitales Vargas y Lídice.
“Los casos de diversas intensidades de insuficiencias respiratorias pasaron de 2.296 a 4.720 en enero, un aumento de 105,5%. Un poco más de dos veces”, declaró el experto.
Asimismo, el número de casos activos «informados tuvo un aumento de 238%, de 4.981 a 16.879 casos durante enero”.
A pesar de que esta ola de contagios se presentó con mayor velocidad, no hay evidencia de que sea más letal.
Lo que se espera del covid-19 en el país
Oletta aseveró que no se sabe cuál será el comportamiento de la enfermedad, puede estar dos meses en la fase ascendente.
Puntualizó que algunas entidades presentan picos en elevación de los casos, como Miranda y Distrito Capital.
Considera que Venezuela se encuentra en una situación importante en cuanto a la magnitud del coronavirus. Asimismo, advirtió sobre la posible llegada de una cuarta ola en esas entidades.
Destacó que la situación del covid-19 en el país fue advertida con antelación por expertos el año pasado.
“La flexibilización ilimitada coincidiendo con ómicron representaría un riesgo que se confirma con esta cuarta ola. Aun así el gobierno dijo que seguiría adelante y no se toma en cuenta la opinión de los expertos en cuanto a los ajustes de la flexibilización donde hay mayor número de casos”, dijo.
Contradicciones en cifras de vacunación
Advirtió las contradicciones que existen entre las cifras que anuncia el gobierno y las que ofrecen la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“El 28 de enero había 46% de vacunados con dos dosis y 70% con la dosis incompleta. No es tal la cobertura, es menor”, observó el especialista.
Dijo que “más de 35% de las personas no recibió dosis, por lo que la población está insuficientemente protegida”, y el gobierno “no debe olvidarse de seguir vacunando y aumentar la cobertura”.
Detalló que en el país no existe un plan de vacunación en el que se pueda verificar el cumplimiento.
Alertó además que el Estado ofrece una tercera dosis con vacunas que no han sido verificadas (caso de la cubana Abdala).
“Estas deben cumplir con un proceso que valide la efectividad y no se pueden aplicar en Venezuela”, expresó.
En cuanto a la falta de dosis de la vacuna rusa Sputnik, algunas personas han recurrido a otras dosis (como la fabricada en China) para completar la pauta mínima de dos aplicaciones.
Oletta aclaró que no existe “suficiente experiencia para reforzar la vacuna rusa con la china”.
Llamó a la población a exigir a las autoridades el cumplimiento con la protección, «ya que esa es una obligación de ellos y un derecho de los venezolanos».
Medidas de protección ante ómicron
Desde «la flexibilización y reapertura de todo ya no sabemos quién contagió a quién”, expresó el exfuncionario. Ante esta situación, consideró que «se debe plantear una dinámica diferente».
Existen varias características que influyen en la propagación de ómicron, como el rasgo de la variable, debido a que es mucho más contagiosa que las anteriores.
Asimismo, las fallas en el plan de vacunación, seguidas por la flexibilización y por último el descuido de las medidas por parte de los ciudadanos. “Todas las medidas son necesarias, no es solamente restricción, este debe ser un proceso integral”, agregó Oletta.
Criticó que el gobierno no haya establecido un mecanismo de promoción para informar sobre el covid. “Hay que educar a la población para que se contribuya con su comportamiento, pero hay una falla comunicacional”, expresó.
Agotamiento de equipos y personal médico
Ante un final incierto en la crisis del covid-19, los ciudadanos aún sufren por la precariedad del sistema de salud.
Oletta subrayó que cada vez es más grave el “agotamiento de los equipos de trabajo, que se han sometido a una gran carga”.
“Si no se toman en cuenta estas situaciones, la calidad de la atención disminuye”, advirtió.
Indicó que como consecuencia de la situación, se producen dos fenómenos importantes: uno de ellos es que las personas prefieren quedarse en casa antes que recibir atención pública, «que está falla”.
Por otra parte, las personas no pueden acudir a los centros médicos privados debido a los altos costos del servicio.
«La barrera de costos es imposible de superar, lo que impide que las personas sean atendidas”, detalló Oletta.
Informan a la población
Ante la carencia de información que reciben los venezolanos sobre el coronavirus y sus variantes, ONG del país se esfuerzan en mantener informados a los venezolanos.
Tal es el caso de Médicos Unidos Venezuela. Su fundador, el doctor José Di Sarli, expresó que desde sus espacios hacen todo lo que está en sus manos.
“Hemos y estamos realizando varias labores o campañas, iniciativas de nuestros propios integrantes, las cuales se han multiplicado en varios estados”, dijo.
“Hay una actividad que está relacionada con la pandemia del covid-19. Se trata de realizar donativos de EPP (equipos de protección personal) a los médicos de primera línea; es decir, médicos de menos rango y que reciben a los pacientes en las primeras consultas o visitas”, dijo.
“A ellos se dona los EPP gracias al aporte del sector privado y de varios colaboradores médicos que se encuentran en el exterior, muchos se compran en el país”, aseguró Di Sarli.
Estas son las herramientas que permiten mitigar un poco la falta de insumos en relación con la protección del personal sanitario.
La organización Médicos Unidos Venezuela también realiza “campañas de concienciación sobre las medidas de bioseguridad, como el uso de mascarillas, lavado de manos y el distanciamiento social, las cuales son medidas efectivas hasta la fecha”.
Destacó el apoyo a la vacunación para “minimizar los efectos de la enfermedad en la población y disminuir la mortalidad por covid-19″.