El dirigente Ismael León anunció su separación definitiva de la Alianza del Lápiz, en la que ocupaba el cargo de secretario de organización nacional. Mediante una carta pública, el diputado a la Asamblea Nacional de 2015 alegó que el partido está sumergido en una autocracia, se cometen arbitrariedades que atentan contra la recuperación del país, no tiene estatutos orgánicos ni instancias para la resolución de conflictos.
“He militado en organizaciones políticas, pero mi pasantía por el Lápiz ha sido inédita. Los acuerdos políticos interinstitucionales que cobran vigencia nacional no se discuten con las regiones, las líneas estratégicas no se consultan con las bases. En el Lápiz no se dialoga, solamente se ejecuta lo que desde la cúpula del consejo nacional se decide”, afirmó.
León reconoció que construir un partido político en Venezuela no es sencillo y menos en los momentos que ahora atraviesa la democracia. Pero, agregó, la hilación de los actos tiene que ser coherente y no ilusoria porque el país necesita respuestas. Por esa razón, el opositor enfatizó que no puede participar en un nuevo fraude al elector venezolano, quien sistemáticamente ha sufrido burlas y desilusión.
Eric Ondarroa “lo expulsó”
El parlamentario aseguró que recientemente Eric Ondarroa, secretario general de la Alianza del Lápiz, lo expulsó de la organización por criterios políticos.
“Mi expulsión jamás pasó por una instancia de deliberación nacional. Fue arbitraria, autócrata y no se me brindó la oportunidad de ejercer mi derecho a la defensa. Mi posición le resultaba incómoda porque no era complaciente y la polémica de mis argumentos no se correspondían con la filosofía de quien conduce los vestigios de la organización, calificando mi accionar como indisciplina e insubordinación”, dijo León.
“La Presidencia de la organización (a cargo de Antonio Ecarri) no se pronunció al respecto, quedando definitivamente firme la decisión del doctor Ondarroa”, añadió.
“Responsabilidad, moral y ética”
Ismael León afirmó que siempre ha respondido con responsabilidad, moral y ética a los venezolanos, procurando no fallarle a la confianza que le han conferido al elegirlo como diputado al Parlamento nacional. Señaló que se opuso al extinto gobierno interino “al percatarse del desastre” que se desencadenó.
“Con posición crítica y gallarda me convertí en uno de los más fervientes opositores de una camada de políticos que defraudaron a la nación, que se enriquecieron apropiándose indebidamente de los recursos producto de Citgo, Monómeros y la ayuda humanitaria que los ciudadanos del mundo tuvieron a bien suministrarle al pueblo de Venezuela”, expresó.