VENEZUELA

Identificado uno de los cadáveres hallados en el relleno sanitario de La Bonanza

por Avatar Sandra Guerrero

A Luis Gerardo Galavís Roa, de 61 años de edad, lo identificaron plenamente mediante experticias odontológicas en la morgue de Bello Monte.

Galavís Roa era conductor del camión cava Chevrolet NPR y había desaparecido desde el 12 de septiembre junto con su ayudante Nelson Ramiro Ardila Núñez, de 37 años años de edad.

Así lo informaron allegados a la familia que realizan los trámites para retirar los restos humanos.

A Galavís Roa lo identificaron en la medicatura forense cuando sus parientes entregaron las fichas de los trabajos que le realizaron en la dentadura.

Galavís Roa y Ardila Núñez regresaban a Coloncito, municipio Panamericano, luego de entregar un cargamento de carne en un negocio de Mesuca, en Petare.

Ese día, a las 6:00 pm, Galavís hizo la última llamada a su esposa y le dijo que estaban de regreso.

Al no llegar a sus hogares, los familiares comenzaron a buscarlos en hospitales y organismos policiales así como también en la ruta que debían cubrir para llegar a Táchira.

Era la segunda vez que el conductor y su ayudante venían a Caracas a traer mercancía.

El camión NPR, aún sin localizar, era propiedad de un hermano de Galavís Roa, quien lo contrataba para hacer viajes por el país.

Luis Gerardo Galavís Roa integraba una familia de 13 hermanos. El cadáver será trasladado a Coloncito donde será sepultado.

El Cicpc detuvo algunos sospechosos, pero quedaron en libertad.

El 5 de noviembre pasado una comisión de funcionarios de la División de Vehículos del Cicpc se trasladó al área boscosa del relleno sanitario de La Bonanza, en Charallave, estado Miranda.

Hicieron un rastreo en la zona y localizaron 11 osamentas humanas que fueron trasladadas a la morgue de Bello Monte para ser identificadas mediante experticias odontológicas y antropológicas.

Las víctimas localizadas en ese lugar serían conductores de camiones que trasladaban mercancía.

Los choferes fueron asaltados por integrantes de una banda que los asesinó para luego vender los vehículos en Colombia, de acuerdo con una de las hipótesis que maneja la policía científica.

La familia de Galavís Roa espera que se haga justicia.