Huniades Urbina, presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría, indicó que de acuerdo con la actualización de la Encuesta Nacional de Hospitales, más de la mitad de los laboratorios de bioanálisis del país se encuentran cerrados.
Destacó que esto hace difícil diagnosticar a los pacientes, quienes no pueden tener una confirmación certera de la patología que padecen.
Urbina añadió que los laboratorios que están en funcionamiento no trabajan correctamente por falta de reactivos y equipo médico.
“El J. M. de los Ríos tuvo uno de los laboratorios más grandes de Venezuela. De las 18 secciones que tenía ahora solo funcionan 3 secciones”, indicó.
El médico reveló que para realizar la encuesta asistieron solo a 40 de los 100 hospitales con los que se realizaba el estudio inicialmente. Esto se debe a que los otros 60 ya no están en funcionamiento.
En cuanto a la dotación de medicinas, Urbina indicó que se ha incrementado 6,5%, sin embargo, aún no es suficiente para atender a los pacientes correctamente.
De 10 personas que ingresan a los hospitales, 50% puede no tener medicamentos necesarios para superar su patología, afirmó Urbina.
La morgues sin capacidad
Consideró que la situación de las morgues de los hospitales es inhumana, pues el personal no tiene cómo mantener a los cadáveres en el lugar.
“Como no hay suficientes cavas para refrigerar cadáveres, hay que colocar cuatro o cinco juntos para preservarlos”, manifestó el doctor con respecto a lo que ocurre en el J. M. de los Ríos.
Con respecto a la situación legal de los médicos venezolanos, resaltó que no cuentan con ningún tipo de protección al momento de perder a un paciente.
“Desde el punto de vista legal, estamos en una trampa porque los médicos atienden a los pacientes en malas condiciones y si ocurre algún percance nos tenemos que hacer completamente responsables”, añadió.